Los aliados del fiscal general de EEUU, Jeff Sessions, han afirmado que el presidente Donald Trump está llevando a cabo una campaña pública deliberada para presionarlo para que renuncie, en lugar de destituirlo sin rodeos, pero el principal abogado del país no tiene intención de dimitir.
Trump dijo en un tuit el martes que Sessions había “adoptado una posición MUY débil” al investigar a su ex oponente en las elecciones presidenciales de 2016, la candidata demócrata Hillary Clinton, por su uso indebido de un servidor de correo electrónico privado. El lunes, Trump calificó de “sitiado” a su fiscal general.
Trump está enojado porque Sessions se retiró de la investigación federal sobre las supuestas connivencias entre el equipo de la campaña electoral de Trump y Rusia. El Kremlin, sin embargo, señala que no interfirió en las elecciones, y Trump ha negado cualquier connivencia.
Source: Agencias