El enemigo israelí siguió adelante con sus brutales ataques en el Líbano el sábado, día 12 de la agresión que mataron a un funcionario de Al-Jamaa Al-Islamiya y al comandante de Al-Qassam en Bekaa occidental y en un campamento de refugiados palestinos en el norte del Líbano.
Un ataque israelí tuvo como objetivo una casa en la ciudad de Al-Rafid en Bekaa occidental, matando al director de la escuela Al-Abrar, Ali Al-Hajj.
Otro ataque israelí tuvo como objetivo un apartamento residencial en el campamento de refugiados palestinos de Beddawi en la ciudad norteña de Trípoli, matando a cuatro personas de la misma familia, incluido el comandante de Al-Qassam, Saeed Atallá Ali.
الجماعة الإسلامية في لبنان تعلن استشهاد علي الحاج بغارة صهيونية استهدفت منزله في الرفيد جنوبي لبنان pic.twitter.com/ucO0lrSHp8
— قناة المنار (@TVManar1) October 5, 2024
Hamas lamentó el martirio de Ali, su esposa y sus dos hijos, enfatizando que sus próximas respuestas a la ocupación priorizarían “las acciones antes que las palabras”.
Mientras tanto, los aviones de guerra israelíes continuaron los ataques aéreos en el sur del Líbano, Bekaa y el suburbio del sur de Beirut, Dahiyeh.
El corresponsal de Al-Manar informó que el número de ataques aéreos israelíes durante la noche en Dahiyeh, en Beirut, llegó a 12.
Uno de los sitios atacados en Dahiyeh fue el complejo Sayyed Shuhadaa en el distrito de Ruweiss.
El viernes, el Ministerio de Salud libanés anunció que más de 2.000 personas han muerto desde que el enemigo sionista lanzó su brutal agresión en el Líbano el 23 de septiembre.
Entre los mártires, había 127 niños y 261 mujeres, añadió el ministerio.
La Organización Mundial de la Salud dijo el sábado que 73 trabajadores de la salud han perdido la vida debido a los continuos ataques israelíes, advirtiendo que el Líbano está sufriendo una grave crisis sanitaria.
Source: Al Manar
