Al menos 15 armados de la comunidad musulmana drusa murieron este jueves en una emboscada en la carretera entre Suweida y Damasco, la capital siria, informaron medios de prensa.
De acuerdo con las fuentes, los armados se dirigían hacia la ciudad de Ashrafiet Sehnaya al sur de Damasco, que presencio violentos choques entre el ejército sirio y las fuerzas de seguridad por un lado, y armados drusos por el otro.
En un contexto relacionado, el líder de la comunidad drusa, el jeque Hikmat Al-Hijri, pidió la intervención de «fuerzas internacionales de mantenimiento de la paz» en Siria, y denunció un «ataque genocida injustificado» contra los miembros de su comunidad.
La calma volvió la víspera a la ciudad de Ashrafiet Sehnaya, al sur de esta capital, tras violentos enfrentamientos que dejaron al menos 22 muertos.
Durante los choques, cazas y drones israelíes efectuaron varios bombardeos en la zona para apoyar a los armados drusos, lo que causó la muerte de militares y agentes de seguridad, además de dejar lesionados a varios civiles.
El gobernador de Damasco-campo, Amer Al-Sheikh, dijo en una conferencia de prensa, que se ha restablecido la seguridad en la ciudad y que fueron arrestados varios delincuentes armados y denunció los ataques aéreos israelíes en la zona.
La tensión comenzó cuando una grabación de audio, atribuida a una persona de confesión drusa, fue circulada en las redes sociales y en la que se insulta al profeta Mahoma, una figura sagrada para los musulmanes.
Al incidente siguieron manifestaciones en diferentes localidades, y luego grupos armados de tendencia extremista atacaron a Jaramana y Sehnaya, habitadas mayoritariamente por drusos.
El Ministerio del Interior emitió un comunicado, en el cual aseguró que inició investigaciones intensivas sobre este asunto y que aún se trabaja para identificar al autor del audio, además de procesar a los involucrados en incitar el caos y socavar la estabilidad.
Aclaró que unidades de las Fuerzas de Seguridad General y del Ministerio de Defensa fueron enviadas para poner fin a estos choques, proteger a los residentes y mantener la paz comunitaria.
Source: Prensa Latina