El ministro de Asuntos Exteriores británico, David Lammy, anunció que el Reino Unido ha suspendido las negociaciones con el gobierno de ocupación israelí sobre un nuevo acuerdo de libre comercio.
Señaló que el espectro de la hambruna se cierne sobre cientos de miles de civiles en la Franja de Gaza, lo cual, según él, es indignante.
También enfatizó que si “Israel” continúa con su operación militar en la Franja de Gaza y no garantiza la entrega de ayuda humanitaria, “tomaremos medidas adicionales en respuesta”.
En un discurso ante la Cámara de los Comunes, Lammy declaró que “la forma en que se está llevando a cabo la guerra en Gaza está dañando las relaciones con “Israel””, enfatizando que las acciones del gobierno israelí “socavan los intereses del pueblo israelí y distorsionan la imagen de “Israel” ante la comunidad internacional”, lo que lleva a “aislarlo de sus amigos y socios en todo el mundo”.
Esta declaración se produce después de que el gobierno británico anunciara el martes que Lamy suspendería las negociaciones sobre un acuerdo comercial con “Israel”, añadiendo que había convocado a la embajadora israelí, Tzipi Hotovely, por la expansión de las operaciones militares en la Franja de Gaza. En un discurso ante la Cámara de los Comunes británica, el primer ministro Keir Starmer expresó su profunda conmoción ante la escalada de las operaciones militares israelíes en la Franja de Gaza, calificando de “insoportable” el sufrimiento humano que se vive allí.
Starmer enfatizó que la reciente autorización de “Israel” para la entrada de una cantidad limitada de ayuda alimentaria a la Franja de Gaza era “totalmente insuficiente”, e insistió en la necesidad de “coordinación con los aliados para responder a esta prolongada crisis”.
Starmer también reiteró su llamamiento al alto el fuego en Gaza, describiéndolo como “la única manera de liberar a los prisioneros”, y enfatizó su oposición al establecimiento de asentamientos en Cisjordania y la necesidad de permitir la entrada de ayuda humanitaria a Gaza.
Se refirió a la declaración conjunta emitida el 19 de mayo con el presidente francés, Emmanuel Macron, y el primer ministro canadiense, Mark Carney, en la que condenaron enérgicamente las operaciones israelíes en Gaza, advirtiendo que “privar a los civiles de asistencia humanitaria esencial es inaceptable y puede constituir una violación del derecho internacional humanitario”.
La declaración pidió el cese inmediato de las operaciones militares y el acceso sin trabas a la ayuda humanitaria, amenazando con tomar “medidas concretas adicionales” si “Israel” no respondía a estas demandas.
Source: Diversas