Un ciudadano libanés murió como consecuencia de un ataque aéreo israelí contra la ciudad de Beit Lif, en el distrito de Bint Jbeil, al sur del Líbano. El ataque aéreo también hirió a tres personas.
Esta misma tarde, una fuerza de infantería israelí de veinte soldados avanzó hacia las viviendas destruidas en el barrio oriental de Kfar Kila, según un corresponsal de Al-Manar.
Las fuerzas de ocupación israelíes reanudaron, el miércoles, sus violaciones de la Línea Azul en la zona de Bir Shuaib, al este de Blida. Más de 50 soldados israelíes hostiles cruzaron la frontera, acompañados por dos excavadoras militares, y comenzaron a demoler terrenos en el mismo lugar, donde se había producido una violación similar aproximadamente diez días antes. El ejército libanés trabajó entonces para eliminar por completo la brecha.
Esta violación se produjo pocas horas después de que las fuerzas de ocupación israelíes se retiraran del territorio libanés en Mays al-Jabal al amanecer y en Blida por la mañana. Posteriormente se supo que excavadoras israelíes habían excavado dos grandes trincheras y erigido barreras de tierra tanto en “Krum al-Marah”, al este de Mays al-Jabal, como en “Bir Shuaib”, al este de Blida. Esta medida representa una continuación de las políticas de campo de la ocupación, basadas en imponer nuevas medidas sobre el terreno en las zonas fronterizas.
El Ejército libanés había eliminado violaciones similares en ambas zonas diez días antes, pero hoy el enemigo israelí repitió las mismas violaciones, atacando claramente la soberanía territorial libanesa e intentando imponer medidas de seguridad mediante trincheras y barreras.
Esta escalada de violaciones se produce en medio de las continuas violaciones por parte de la ocupación israelí del alto el fuego negociado internacionalmente y alcanzado en noviembre de 2023.
A pesar del compromiso de la parte libanesa con la moderación y la cooperación con las fuerzas de la FPNUL, las autoridades ocupantes no han cesado en sus operaciones agresivas y acciones de provocación sobre el terreno, incluyendo incursiones limitadas, allanamientos, instalación de dispositivos de espionaje, disparos y vuelos intensivos de reconocimiento.
En este contexto, lo que ocurre hoy es una prolongación de una larga serie de violaciones que atentan no solo contra la soberanía libanesa, sino también contra la credibilidad de cualquier esfuerzo internacional por restablecer la estabilidad en el sur.
Source: Al Manar