Un equipo de las Naciones Unidas que visita el estado de Rajin, en el oeste de Myanmar, ha señalado que la magnitud del sufrimiento de los restantes musulmanes rohingyas que quedan en la zona va mucho más allá de la imaginación.
“La escala del sufrimiento humano es inimaginable y la ONU envía sus más profundas condolencias a todos los afectados”, dijo la ONU el lunes después de que tres de sus miembros se unieran a una visita controlada por el gobierno a las zonas norteñas de Rajin. La represión del régimen de Myanmar dejado a cientos de miles de personas sin hogar.
La ONU pidió al régimen de Myanmar que ponga fin al “ciclo de violencia” contra los rohingyas, reiterando “la necesidad de un mayor acceso humanitario” a la zona.
Source: Agencias