El ataque más sangriento en la historia reciente de Egipto, perpetrado por el grupo terrorista Daesh el viernes contra una mezquita de Sinaí dejó al menos 305 muertos y 109 heridos. Pero la pregunta es, ¿por qué el Daesh cometió un acto tan demente?
Hay varias razones, la primera de las cuales es que la derrota ded Daesh en Siria e Iraq ha asestado un golpe muy duro y mordaz a este grupo terrorista. Para desviar a la opinión pública de la eliminación de Daesh en Albu Kamal y su fracaso en Siria y para recordar a todos su existencia, la organización terrorista ha llevado a cabo un crimen tan horrible en Egipto.
El ataque ocurrió durante las oraciones del viernes en la mezquita Ar Rawda en Bir al Abed, a 40 km al oeste de al Arish, capital de la provincia del Norte de Sinaí. La mezquita estaba en esta área predominantemente sufí y un grupo de soldados egipcios rezaban allí. El Daesh quería matar dos pájaros de un tiro: apuntar a la comunidad sufí en Egipto y matar a un gran número de soldados egipcios.
Con este ataque, Daesh ha demostrado su adhesión a la ideología wahabí y takfiri, que manifiesta su hostilidad hacia los musulmanes que no la siguen, y en especial hacia los shiíes y los sufíes. Este grupo tiene una presencia en el Sinaí, que comprende a algunos miembros extremistas del grupo de los Hermanos Musulmanes, que huyeron después del derrocamiento del presidente Mohammed Morsi en 2013 y se han unido a las filas del Daesh. Pero a pesar de la propaganda y las enormes sumas de dinero, la organización terrorista no se ha hecho popular.
El objetivo de este ataque es provocar una especie de conflicto confesional en Egipto. Los sufíes en el norte de África son una corriente influyente, que es vulnerable al Daesh. Esto sucede en Egipto, pero también en Libia, Túnez o Argelia.
Source: Press TV
