Las recientes campañas del Ejército sirio en la Guta Oriental y en el Sur de Siria han dejado ver la importancia de la artillería en estas campañas hasta el punto de que las concentraciones y posiciones de los grupos terroristas son ahora a menudo destruidas antes de que los soldados inicien sus asaltos contra las mismas.
El periódico ruso Rosiiskaya Gazeta ha señalado que la artillería del Ejército sirio arrasa las posiciones enemigas con su potencia de fuego aniquilando todo lo que obstaculiza el avance de sus unidades.
Así por ejemplo, el cañón ruso Mesta B, de 152 mm, ha sido ampliamente utilizado contra los terroristas en Siria desde el otoño de 2015. El cañón ha demostrado su efectividad destruyendo las fortificaciones de los terroristas y sus concentraciones.
El cañón ha sido colocado sobre un trailer que puede alcanzar velocidades de hasta 80 km/h.
El cañón Mesta-B puede destruir blancos situados a una distancia de casi 30 kms de distancia con proyectiles que pesan entre los 42 y 43 kgs.
La máxima efectividad se logra cuando se reúnen decenas piezas de artillería, que abren fuego al mismo tiempo sobre un objetivo o línea de defensa. Esto crea el efecto de un “diluvio de fuego”.
El Ejército sirio ya ha comenzado a bombardear las posiciones de los terroristas en Idleb con salvas de artillería con el fin de ablandar sus posiciones antes del inicio de la esperada ofensiva militar, que podría ser la última de la guerra. B
Source: Agencias