Según Izvestia, 10 barcos de guerra y 2 submarinos de la Marina rusa se han unido a los navíos rusos ya posicionados en el Mediterráneo.
“En este mes de agosto, alrededor de 10 navíos de guerra y 2 submarinos se han unido a la Flota rusa del Mediterráneo”, anunció este martes 28 de agosto el periódico ruso Izvestia, que cita una fuente en el seno del Ministerio de Defensa ruso.
Por su parte, el diario israelí Haaretz habla de que 13 barcos rusos atravesaron la pasada semana el Estrecho del Bósforo con dirección a la costa siria. Entre estos barcos se encuentran las fragatas lanzamisiles Amiral Grigorovitch y Amiral Essen.
En la actualidad, barcos de la Flota del Mar del Norte, del Mar Báltico y del Mar Negro se han desplegado simultáneamente en el Mediterráneo. Este despliegue de navíos incluye también al crucero lanzamisiles Mariscal Ustinov, varios navíos anti-submarinos, 2 patrulleros y una corbeta lanzamisiles.
Según expertos militares, este gran grupo marítimo ha sido estacionado en el Mar Mediterráneo para apoyar la operación del Ejército sirio en la provincia de Idleb, la única región que está en una gran parte bajo el control de los grupos terroristas.
Sin embargo, estos expertos también señalan que la presencia de una poderosa rusa es un escudo frente a una posible agresión tripartita (EEUU, Reino Unido y Francia) contra Siria.
“Rusia tiene la intención de restablecer la estabilidad en la región y no permitirá que una nueva guerra se reproduzca en Siria”, afirman los expertos.
EEUU rompe el acuerdo entre Putin y Trump
Fuentes del Ejército israelí dijeron a Haaretz que las amenazas estadounidenses han roto el acuerdo concluido entre Vladimir Putin y Donald trump en Helsinki y que John Bolton, el halcón que sirve como consejero de seguridad nacional en la Casa Blanca, había llegado a un acuerdo con Tel Aviv que prevé acciones militares concertadas entre EEUU e Israel contra el Ejército sirio y sus aliados. Haaretz deja ver el despliegue de la flota rusa respondería a esta “ruptura del acuerdo Putin-Trump”.
El Ministerio de Exteriores de Rusia ha denunciado en los últimos días la puesta en práctica de una provocación química en Idleb en coordinación con los preparativos bélicos de EEUU, el Reino Unido y Francia. Los tres países buscarían aprovechar dicha provocación química para lanzar un ataque de envergadura contra Siria.
El Ejército sirio se encuentra en estado de máxima alerta y sus unidades de defensa antiaérea están dispuestas para responder a cualquier ataque con misiles.
“Los terroristas en Idleb tienen la intención de organizar un ataque químico para acusar falsamente a Damasco de usar armas químicas y así preparar el terreno para un ataque militar de los EEUU y sus aliados contra el Ejército sirio”, dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia.
Las autoridades estadounidenses mencionan un posible ataque químico cada vez que el Ejército sirio logra una victoria decisiva sobre los terroristas, dijeron las autoridades rusas.
Source: Diverso