La información que se ha filtrado desde la Casa Blanca en los últimos días apunta a fuertes tensiones dentro de la administración de EEUU y a la negativa de varios funcionarios a obedecer a su inquilino, el presidente Donald Trump.
En 2016, cuando Trump luchó ferozmente para obtener acceso a la Casa Blanca, una de las posibilidades de que los analistas preveían era el estallido de una rebelión dentro de su administración.
En ese momento, el ex director de la CIA Michael Hayden había dicho que existía la posibilidad de que el Ejército estadounidense se negara a obedecer las órdenes dadas por Donald Trump si el líder republicano se convertía en presidente y decidía mantener algunas de sus promesas de campaña. Ahora, dos años después del comienzo de la presidencia de Trump, los eventos muestran que algunas de estas predicciones se han hecho realidad: hay una verdadera rebelión contra el presidente estadounidense dentro de la Casa Blanca.
Aunque ya había signos de desacuerdo dentro de la administración estadounidense, como evidenciaron las destituciones y las renuncias en cascada, las revelaciones del periodista estadounidense Bob Woodward en su libro sobre el presidente y el reciente artículo del New York Times sobre la formación de un núcleo de resistencia contra el presidente de EEUU en la Casa Blanca muestran una verdadera lucha interna en el corazón de la administración Trump.
Un miembro de alto rango de la administración del presidente de EEUU escribió un artículo de forma anónima en el New York Times en la que afirmaba que los miembros clave de la administración de Trump estaban muy alarmados por su comportamiento “errático” e “inmoral” de Trump y estaban tratando activamente de socavar su poder.
En el artículo publicado el miércoles con el título de “Formo parte de la resistencia dentro de la administración Trump”, el responsable explica por qué y cómo se esfuerza, junto con otros, para luchar desde dentro contra las “peores inclinaciones” del inquilino de la Casa Blanca. Él confirma también el retrato elaborado por el periodista de investigación Bob Woodward.
“Muchos altos funcionarios de su administración trabajan diligentemente desde dentro para frustrar partes de su agenda y de sus peores inclinaciones”, señala el responsable anónimo en el artículo del Times.
Enojado con el artículo, Trump llamó al artículo “editorial desinflado” y “deshonesto” y calificó a su autor de “cobarde”. Su portavoz, Sarah Sanders, también lo describió como un artículo “patético, imprudente y egoísta” y criticó al New York Times por publicarlo.
Hasta ahora, se pensaba que el peligro más grave para la administración Trump era la investigación de Robert Mueller sobre la supuesta interferencia de Rusia en las elecciones presidenciales de 2016, pero ahora parece que debe enfrentar una rebelión dentro de su administración. La primera víctima podría ser el Secretario de Defensa, James Mattis.
La Casa Blanca está “activamente” discutiendo posibles candidatos para reemplazar a James Mattis como secretario de Defensa, de acuerdo con supuestas filtraciones de miembros de la administración a la prensa, y las especulaciones de que el líder del Pentágono podría renunciar ya están en marcha.
Citando a un alto funcionario de la Casa Blanca, el Washington Post informó el miércoles que “la posibilidad de un reemplazo de Mattis ahora es más realista que nunca”.
Según el informe, muchos funcionarios de la administración Trump esperan que Mattis deje su puesto en los próximos meses.
El propio Trump, sin embargo, desmintió el informe, señalando que Mattis se mantendría en su cargo. “Él se quedará allí. Estamos muy contentos con él. Hemos logrado muchas victorias”, dijo Trump a la prensa el miércoles.
Source: Periódicos