El periodista iraní Mohammad Sadegh Husseini reveló que el jefe de la Fuerza Al Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica, Qassem Suleimani, ha frustrado un golpe estadounidense que casi estranguló a Iraq la pasada semana.
En un artículo publicado en el periódico libanés Al Bina, Husseini asegura que el oficial de alto rango iraní ha logrado convencer a las dos principales fuerzas kurdas y a la mayoría de los sunníes de que su interés nacional radica en Bagdad y no en Washington.
Él los disuadió de dar sus votos en el Parlamento al primer ministro saliente Haider al Abadi, el candidato favorito de EEUU que envió a su enviado Brett McGurk para apoyarlo.
Sin la llegada de Soleimani, enviado de emergencia a Bagdad, los dos principales bloques kurdos que salieron victoriosos en elecciones iraquíes en la región del Kurdistán y la mayoría de los sunníes hubieran dado probablemente su apoyo a Abadi, que estaba implicado hasta el cuello en un acuerdo estadounidense a largo plazo para sacar a Iraq del eje de la resistencia, a cambio de apoyo para un segundo mandato, escribió el periodista iraní.
Según él, las presiones del enviado estadounidense se ejercieron por medio de las amenazas, la intimidación y el uso de la fuerza si era necesario, “Abadi o la destrucción de Basora” era su consigna. Él se refirió a las escenas de violencia de provocadores infiltrados en las manifestaciones legítimas que pedían una mejora del nivel de vida. Esa minoría de individuos atacaron las instituciones del Estado, sedes de partidos y el consulado iraní.
Husseini sospecha que EEUU está detrás de este tipo de episodios, que han tenido lugar desde principios de julio.
Citando fuentes informadas sobre Iraq, Husseini subrayó que EEUU ha sido incapaz de obtener lo que buscaba en las urnas y quiso entonces llevar a cabo un golpe de estado contra el proceso democrático y fomentar la sedición entre los shiíes.
“Una fuente diplomática bien informada en Bagdad nos dijo que lo que pasa en Iraq es un plan norteamericano-saudí que busca incendiar todo Iraq y no sólo Basora. Si hubiera tenido éxito, la escalada habría continuado intensificándose y el caos habría alcanzado Nayaf, Kerbala y otras provincias iraquíes”, señaló.
La pasada semana, el Parlamento iraquí se reunió por primera vez desde el escrutinio legislativo del mes de mayo para elegir a su presidente y nombrar al primer ministro. El periodista iraní señala que una fuente de un servicio de inteligencia que sigue el tema iraquí señaló que el primer ministro saliente se había puesto de acuerdo con los servicios de inteligencia norteamericanos y británicos para que estos apoyasen su candidatura al frente del gobierno iraquí a cambio de integrar el país en el plan estadounidense que busca confrontar a Irán en el plano local y el regional. También habría prometido retirar a las fuerzas del Hashid al Shaabi de las fronteras sirio-iraquíes.
Él habría igualmente habría convenido con los norteamericanos el confiar las rutas internacionales que unen Iraq y Jordania e Iraq y Siria a sociedades de seguridad estadounidenses a fin de poner fin al control del Hashid al Shaabi sobre las rutas de aprovisionamiento de Irán hacia Siria.
A cambio, los norteamericanos le habrían prometido contener al Daesh en Iraq.
Husseini señala que la reacción de las distintas fuerzas iraquíes ha permitido abortar este golpe blando y “no queda más que la operación de limpieza necesaria y los últimos toques para asegurar el éxito de las medidas dirigidas a tomar el control del país de manos de los golpistas”.
El lunes 10 de septiembre, la Maryaaiyah, la más alta instancia religiosa de Iraq, anunció que la candidatura de Abadi y de otros cuatro hombres políticos de Iraq no era admisible.
Source: Al Bina