Un responsable de la compañía Tecnologías Radio-Electronicas ha dado detalles sobre el despliegue del sistema rusa Krasuja en Siria.
“Además del sistema normal de perturbación, el Krasuja es capaz de interferir las armas de alta precisión, es decir, misiles y bombas guiados que Israel pueda utilizar”, dijo Vladimir Mijeev, consejero del primer vicedirector general de la compañía que fabrica estos sistemas. Él anunció que la empresa continuará sus operaciones en la región.
“Sistemas adicionales serán entregados para desbaratar todos los sistemas de control de los aviones y los barcos hostiles. Ellos son sistemas para perturbar las ondas cortas y las comunicaciones de alta frecuencia”.
Él dijo que los instrumentos de perturbación electrónica serán reforzados en Siria en las próximas semanas. “La decisión ha sido tomada”, señaló. “Creo que al mismo tiempo que, con la creación del Grupo de Defensa Aérea, los sistemas de perturbación electrónica serán también desplegados en nuevas localizaciones”.
Mijeev subrayó que los sistemas de perturbación estarán plenamente integrados en el conjunto de la defensa antiaérea. Él explicó que “la organización tradicional de la defensa aérea incluye radares y técnicas de radio, un sistema de lanzamiento de misiles antiaéreos y un sistema de perturbación. Todos estos elementos están integrados en un sistema de control automatizado”.
Él dijo que todo ello permitirá la creación de complejos de defensa que protejerán áreas enteras de Siria de los ataques con aviones o misiles guiados.
El Krasuja, un sistema sin igual
El sistema de lucha radioelectrónica Krasuja, desarrollado en Rusia, puede estar operativo en diez minutos y es totalmente automatizado, manifestó, por su parte, Guennadi Kaprálov, director general de la empresa Kvant.
“El equipo Krasuja es muy compacto y puede estar operativo en sólo diez minutos; además, es totalmente automatizado”, declaró Kaprálov a RIA Nóvosti.
“Es un sistema que “no tiene análogos en el mundo ni los tendrá en el futuro próximo”, afirmó.
Los sistemas de la serie Krasuja detectan equipos radioelectrónicos del enemigo, analizan el tipo de señales que emiten y producen interferencias alterando su funcionamiento.
Como consecuencia, el adversario pierde la posibilidad de detectar objetivos y apuntar sus armas.
El desarrollo ruso puede servir para garantizar la seguridad de instalaciones estratégicas, incluidas plataformas y torres petroleras, centrales hidroeléctricas, aeropuertos y nudos ferroviarios.
La empresa Kvant, fabricante de los equipos Krasuja, se especializa en dispositivos móviles para reconocimiento radiotécnico y neutralización de radares de aviones; ha desarrollado el sistema de lucha radioelectrónica Moskva.
Source: Medios rusos