El gobierno saudí ahora ha anunciado una serie de nuevas mentiras sobre el asesinato del disidente Yamal Khashoggi. El New York Times informó que tales mentiras “insultan la memoria de Yamal y nuestra inteligencia”.
“El gobierno de Arabia Saudí emitió el viernes una declaración en la que afirmaba que Yamal murió cuando una pelea a puñetazos estalló en su consulado en Estambul. ¿De verdad? Esta es una pelea a la que los matones saudíes trajeron una sierra para huesos para poder desmembrarlo después. Según algunos informes, comenzaron el desmembramiento mientras él aún estaba vivo”, escribió el columnista Nicholas Kristof en el NYT.
“También es grotesco que las autoridades saudíes afirmen que un periodista cuyos dedos fueron amputados como parte de su tortura, de alguna manera, lograra participar en una pelea a puñetazos. Yamal ya no tenía puños”.
Kristof criticó asimismo el encubrimiento del asesinato por parte del presidente Donald Trump, que restó importancia al asesinato de Yamal y apoya los esfuerzos de Arabia Saudí para buscar chivos expiatorios con el fin de tapar la responsabilidad del príncipe heredero Mohammed bin Salman (MBS).
Mientras tanto, el comentarista estadounidense arremetió contra el príncipe heredero MBS “del que casi todos creen que debió haber aprobado esta operación”.
“MBS se dice ahora que significa (según el significado de las letras en inglés), “Señor Sierra para Huesos” (Mister Bones Saw) conducirá una investigación sobre lo que sucedió. Eso es como nombrar a O.J. Simpson para investigar el asesinato de (su esposa) Nicole Brown Simpson”.
Dijo que las mentiras saudíes son “tan descaradas e inverosímiles que ponen en contacto lo fuera de la realidad que está MBS y sugieren que el príncipe heredero saudí tendrá el respaldo de EEUU en este encubrimiento”.
Kristof dijo que MBS “ya se salió con la suya en el secuestro del primer ministro del Líbano y en la creación de una hambruna que afecta a ocho millones de yemeníes”.
En este contexto, advirtió que si el príncipe heredero saudí también se sale con la suya en el tema del asesinato de Khashoggi, que era residente en EEUU y columnista del Washington Post, “eso supondrá una luz verde para él y para cualquier otro autócrata que quiera hacer desaparecer a un periodista crítico. Los periodistas y activistas por la democracia en todo el mundo tendrán dianas colocadas a sus espaldas”, señaló.
Source: Periódicos