El gobierno de El Líbano reclamará ante la ONU cuentas a Israel sobre el hundimiento en 1982 de un barco que transportaba refugiados como resultado de lo cual murieron 25 personas.
Reportes periodísticos propalados en Tel Aviv difundieron que un submarino israelí disparó torpedos contra una embarcación libanesa que llevaba a bordo 54 civiles libaneses y de otros países, cuando intentaba llegar a Chipre.
Según esos informes, el capitán del submarino, identificado con las siglas mayor A., creía que el barco transportaba a combatientes palestinos.
La cancillería libanesa prepara un expediente del caso para presentar una queja ante el Consejo de Seguridad de la ONU y solicitar compensación a las autoridades israelíes.
Dados fallidos intentos anteriores, es poco probable que este camino dé resultado, precisaron los expertos.
Con anterioridad, la Asamblea General de la ONU aprobó una resolución no vinculante que demanda de Israel un pago de 850 millones de dólares a El Líbano por un derrame de petróleo, al bombardear un almacenamiento de crudo en Jiyyeh durante la invasión de julio de 2006. Israel nunca pagó.
De acuerdo con el especialista en derecho internacional Shafic al Masri, el estado libanés debe probar que el Estado israelí ordenó el ataque contra el barco de migrantes. Los reportes de prensa no bastan, arguyó.
Source: PL