A pesar de toda las presiones, Siria y Corea del Norte han decidido ampliar sus relaciones. La reciente visita oficial del Ministro de Relaciones Exteriores de Corea del Norte, Ri Yong Ho, a Damasco, debe verse desde este ángulo.
Durante una visita a Siria esta semana, el ministro de Relaciones Exteriores de Corea del Norte subrayó repetidamente que no permitiría “el debilitamiento de las relaciones de su país con Damasco”.
Destacó que su país estaba bajo presión extranjera, porque no quiere cumplir con los deseos de algunos países extranjeros y rechaza su interferencia.
Esta posición es compartida por el presidente sirio Bashar Assad, quien también insistió en fortalecer las relaciones Damasco-Pyongyang a pesar de las presiones.
Durante muchos años, EEUU y algunos países europeos han estado “preocupados” por los vínculos entre Corea del Norte y Siria, y el régimen de Tel Aviv ha estadotambién involucrado en este asunto.
Durante dos décadas, EEUU ha acusado repetidamente a Corea del Norte y Siria llevar a cabo intercambios militares masivos, como si esto fuera un delito internacional. En 1992, aprobaron sancione contra estos países tras la firma de un contrato para la venta de misiles de crucero.
La visita a Siria del ministro de Relaciones Exteriores de Corea del Norte, Ri Yong Ho, demostró una vez más que las amenazas y las sanciones no pueden impedir el desarrollo de relaciones entre dos países independientes.
El ministro de Relaciones Exteriores de Siria, Walid al Muallim, y su homólogo norcoreano discutieron la “coordinación” en las posiciones de los dos países sobre asuntos internacionales y temas de interés común.
Las dos partes también intercambiaron información sobre su cooperación bilateral en diversos campos antes de abordar los desafíos comunes que representan una amenaza para su soberanía e independencia.
Source: Agencias