Siria aplicará una nueva regla de enfrentamiento con Israel, ahora que Rusia ha adoptado una postura más firme y clara en el conflicto entre Israel y el Eje de la Resistencia. Damasco ahora responderá a los ataques israelíes: si un objetivo militar en particular resulta atacado, responderá atacando un objetivo similar en Israel. Los responsables políticos de Damasco dijeron que “Siria no dudará en atacar un aeropuerto israelí si Israel ataca y golpea el aeropuerto de Damasco”. Esto se hará con el consentimiento de los militares rusos situados en el país árabe.
La anterior postura de neutralidad de Rusia hacia Israel en Oriente Medio resultó muy costosa. Ella llevó a la destrucción de un avión IL-20 y la muerte de los 15 oficiales que estaban allí y que habían recibido un entrenamiento riguroso para utilizar los sistemas más avanzados de comunicación y espionaje.
Rusia luego entregó a Siria sus avanzados misiles S-300. El S-300 representa una amenaza para los aviones israelíes solo si violan el espacio aéreo sirio. Tel-Aviv ha mantenido sus aviones apartados de los cielos sirios desde septiembre pasado, pero ha lanzado misiles de largo alcance contra algunos objetivos en Siria.
Durante varios meses, el presidente ruso Vladimir Putin se negó a recibir al primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu. Solo tras ser acosado por este último, Putin finalmente accedió a reunirse con él brevemente a la hora del almuerzo durante la celebración de una gran cumbre o reunión de jefes de Estado, pero sin compromisos ni reconciliación. Rusia ahora ha adoptado una postura clara y no tiene intención de abrir sus brazos a Israel ni perdonarlo. Rusia se ha dado cuenta de que su generosidad (al hacer la vista gorda a las actividades de Israel en Siria) nunca ha sido reconocida ni apreciada por Tel Aviv.
Esta semana, Moscú aceptó recibir una delegación militar israelí encabezada por el mayor general Aharon Haliva, ante la insistencia de Israel en romper el hielo entre los dos países. Sin embargo, Rusia no cambiará su política en Siria y no tolerará ningún bombardeo israelí de objetivos sirios o iraníes allí.
Según la fuente, “Rusia ha informado a Israel que los oficiales rusos están presentes en todas las bases militares sirias o iraníes y que cualquier ataque contra objetivos sirios o iraníes también afectará a las fuerzas rusas. Putin no permitirá que sus soldados y oficiales sean alcanzados por un bombardeo directo o indirecto de Israel.”
Además, según diversas fuentes, Rusia ha dado luz verde a Siria para atacar a Israel en cualquier momento si los aviones de Tel Aviv atacan objetivos militares sirios o lanzan misiles de largo alcance sin sobrevolar Siria (por temor a los S-300 y para evitar que sus aviones sean abatidos sobre Siria o el Líbano).
Las fuentes confirmaron que Siria, contrariamente a las afirmaciones israelíes, ahora tiene misiles muy precisos capaces de golpear cualquier objetivo en Israel. Las Fuerzas Armadas sirias han recibido un número no revelado de misiles de largo y mediano alcance de Irán. Estos misiles utilizan el sistema de posicionamiento satelital GLONASS, que es la abreviatura de Globalnaya Navigazionnaya Sputnikovaya Sistema, la versión rusa del GPS. La entrega por parte de Irán y la fabricación dentro de Siria de misiles se realizarán en lo sucesivo. Damasco dispone ahora de una gran cantidad de misiles de precisión.
La nueva regla de enfrentamiento de Siria ahora es: un aeropuerto será atacado si Israel ataca un aeropuerto, y cualquier ataque contra un cuartel militar o centro de comando y control será seguido por otro ataque contra un objetivo similar en Israel. La decisión se habría tomado al más alto nivel y se ha establecido un “banco de objetivos” en Israel.
Source: ejmagnier.com