“Rusia e Irán están en contra de la presencia de fuerzas extra-regionales y especialmente de los estadounidenses en la región del Mar Caspio”, dijo Anatoly Tsiganuk, miembro del Centro de Estudios Político-Militares del Cáucaso. “La presencia de estas fuerzas no ayudará a la seguridad de la región”, dijo,
“Estoy convencido de que si las fuerzas extranjeras de EEUU pisaran la región del Mar Caspio, la estabilidad de los países ribereños se pondría en peligro”, advirtió Anatoli Tsiganuk.
“El crear caos e inestabilidad son es la táctica que usualmente lleva a cabo EEUU cuando busca dominar una región y la OTAN lo está ayudando en este esfuerzo”, agregó.
“Visto el negro balance de las fuerzas norteamericanas en Iraq y en Afganistán, hace falta impedir por todos los medios que Occidente y EEUU pongan el pie en la región del Mar Caspio. A este respecto, realizamos todas las coordinaciones posibles para alcanzar este objetivo, que precisa de la participación de los países ribereños. La Convención sobre el estatuto del Mar Caspio establece que los cinco países ribereños son los que deben establecer la seguridad en la región”, añadió.
La Convención sobre el estatuto del Mar Caspio fue firmada el 12 de agosto de 2018 durante la 5ª cumbre de países ribereños: Rusia, Irán, Kazajistán, Turkmenistán y Azerbaiyán. El tratado también establece la división de los recursos naturales y la regulación del tráfico marítimo y militar entre los cinco países.
Irán y Rusia disponen de las fuerzas navales más grandes en el Mar Caspio. Su cooperación bilateral es, por lo tanto, de importancia crucial frente a la presencia extranjera.
“Cooperamos ya en la lucha contra los grupos terroristas y extremistas, el narcotráfico y el rescate en el mar en situaciones de emergencia”, dijo el investigador ruso.
Rusia e Irán, cuya política exterior apunta a prevenir las tensiones en la región, están decididamente inclinados a fortalecer su cooperación marítima.
Source: Press TV