A 1.072.000 ascendió la cifra de desplazados sirios que retornaron al país desde territorios en el extranjero, según datos de los comités de coordinación al respecto de esta nación y Rusia.
A esta cifra se suman los 19.500 que regresaron de Jordania, desde octubre último, cuando fue reabierto el cruce fronterizo de Nassib, precisó a su vez el coronel, Mazen Ghandur, jefe del Centro de Migración y Pasaportes en la zona.
A esos grupos se les garantizó un atención médica y alimentaria primaria y luego fueron trasladados a sus lugares de origen con medios de transporte garantizados por el Gobierno sirio, señaló.
Mientras, centenares de refugiados, en su mayoría mujeres y niños, lograron salir del campamento de Rubkan, al este de Damasco y junto al triángulo fronterizo entre este país, Iraq y Jordania, a pesar de los obstáculos de militares estadounidenses asentados en la cercana e ilegal base de Al Tanf.
De acuerdo con los datos de las autoridades sirias y rusas, 10.000 de esos desplazados lograron utilizar el corredor humanitario establecido en el cruce de Jeleguem.
Testimonios recogidos en medios de prensa indican que ‘faltan los alimentos y el más mínimo nivel de atención médica, y los grupos terroristas armados patrocinados por EE.UU. roban los alimentos y abusan de los civiles’,
Los desplazados describieron a Rukban como el campamento de la muerte y denunciaron las calamidades y la catastrófica situación en que vivían, además de denunciar que los extremistas amparados por las tropas estadounidenses saquean la escasa ayuda que arriba al campo.
En Rubkan están hacinados más de 40.000 ciudadanos sirios y tanto Siria, Rusia y la Cruz Roja Internacional insisten en la necesidad de evacuarlos ante las dramáticas condiciones en el área.
Source: PL