El gobierno de EEUU ha cortado el agua a la Embajada de Venezuela para intentar expulsar de ella a los activistas estadounidenses que apoyan la legalidad y buscan impedir su toma por opositores pro-Guaido.
Con el objetivo de suprimir las voces que apoyan al presidente legal de Venezuela, Nicolás Maduro, la administración estadounidense cortó el suministro de agua a un grupo de militantes contra el golpe reunidos en la Embajada de Venezuela en Washington, para obligarlos a abandonar la misión diplomática.
Los miembros del Colectivo de Protección de la Embajada de Venezuela declararon el sábado 11 de mayo que ya no se beneficiaban de los servicios públicos después de que se cortara el suministro de agua.
“Ahora, el gobierno de EEUU cortó el agua en la embajada de Venezuela para obligarnos a salir de ella. No hay electricidad, no hay agua y disponemos de poca comida. Así es como el Gran Hermano intenta aplastar a otros países. Nos mantenemos firmes”, escribió Medea Benjamin en Twitter.
Benjamin también dijo que la lucha colectiva para la protección de la Embajada de Venezuela permanecerá grabada en la historia y señaló que los activistas intentaban detener “un golpe de estado, una invasión estadounidense y una guerra civil”.
Los miembros del colectivo, motivados por su deseo de evitar que los representantes del líder opositor venezolano Juan Guaido tomen ilegalmente la misión, con el apoyo del gobierno de EEUU, permanecen en la Embajada con la autorización del Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela desde fines de abril.
Los enfrentamientos entre los activistas de protección de la Embajada de Venezuela y los elementos pro-Guaido se intensificaron la semana pasada fuera del edificio. Nueve personas fueron arrestadas.
Source: Agencias