El canal libanés Al Mayadin informó el miércoles, 15 de mayo, acerca de 10 operaciones realizadas por fuerzas yemeníes (Ejército + Ansarulá) en suelo saudí, una de las cuales fue el ataque de drones contra instalaciones petroleras pertenecientes a la compañía ARAMCO en las provincias de Afif y Al Duwadimi.
El canal yemení Al Masirah informó también el miércoles por la mañana, de 10 operaciones militares de las fuerzas yemeníes contra objetivos importantes en la profundidad del territorio saudí, incluyendo el ataque contra un oleoducto y estaciones de bombeo.
El portavoz de la inteligencia saudí admitió que dos instalaciones petroleras en la provincia de Riad habían sido afectadas, mientras que el ministro de Energía saudí también informó sobre el incendio de las instalaciones petrolíferas de la empresa estatal ARAMCO.
“Dos estaciones de bombeo de petróleo pertenecientes a la compañía ARAMCO en las provincias de Al Duwadimi y Afif han sido atacadas con drones suicidas”, dijo el portavoz de la inteligencia saudí.
El ministro saudí de Energía, Jalid Al Faleh, anunció que entre las 6 am y las 6:30 am del martes 14 de mayo, dos estaciones de bombeo del oleoducto este-oeste fueron atacadas y dañadas cuando estaban transfiriendo petróleo desde los pozos y el flujo quedó cortado.
Fracaso de las defensas saudíes
En un artículo publicado el miércoles, el analista árabe, Abdel Bari Atwan, señala el alcance de las deficiencias sufridas por el sistema de defensa antimisiles saudí, fallos sacados a la luz después de este ataque: “Los drones que interrumpieron el flujo de petróleo saudí solo cuestan 300 dólares. Riad debería haber disparado misiles Patriot para interceptarlos, misiles cuyo coste supera los 4 millones de dólares cada uno. Para interceptar un avión no tripulado, se necesitan varios misiles Patriot y, de nuevo, el resultado es fácil de calcular.
Para Arabia Saudí, que ha gastado cientos de miles de millones de dólares en armas, es un doloroso revés no poder proteger sus instalaciones vitales. Los radares saudíes no pudieron detectar el asalto. Y lo peor está por venir: según las fuentes de Ansarulá, el movimiento es capaz de lanzar ataques simultáneos que involucren a “docenas de drones a la vez”. Ansarulá también ha prometido extender su ataques contra las instalaciones petrolíferas saudíes si Riad no se somete a un acuerdo.
Los que disponían solo de Kalashnikov ahora pueden construir drones
En este contexto, el viceministro de Inteligencia yemení, Fahmi al Youssefi, anunció que la operación realizada el martes 14 de mayo por la unidad de drones del Ejército yemení fue un acontecimiento sin precedentes que transmitió varios mensajes. El mensaje más importante, según esta autoridad yemení, es el siguiente: “Las mismas personas que no tenían otro arma que los Kalashnikov ahora pueden construir drones que golpean el corazón del país líder de la coalición.”
Del mismo modo, un miembro del Consejo Político de Ansarulá, Mohammed al Bajiti, dijo al canal qatarí Al Yazira que los ataques se llevaron a cabo con el objetivo de ampliar la lista de objetivos en Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos para convencer a estos dos países de que reconsideren su agresión contra Yemen. En el caso de que esta continúe, los ataques contra instalaciones petrolíferas de ambos países se incrementarán.
Los combates se intensifican
También el martes 14 de mayo, fuerzas conjuntas de Yemen frustraron un intento de la coalición saudí para infiltrar mercenarios en el distrito de Jabb wa ash Shaaf de la provincia de Al Yauf, en el norte del país. Un gran número de mercenarios de la coalición fueron muertos. Los medios de comunicación yemeníes también informaron que durante un ataque del ejército yemení en la región de As Sadis en la provincia de Nayran, en el sur de Arabia Saudí, un número de soldados saudíes murieron o resultaron heridos.
Arabia Saudí y sus aliados regionales han lanzado desde marzo de 2015 una guerra de agresión contra Yemen para instalar en el gobierno de ese país al presidente dimitido Abed Rabbo Mansur Hadi.
Source: Diverso