A pesar de los extensos servicios a EEUU, tanto en Siria como en otros lugares, los estadounidenses se están preparando para revelar su paquete de sanciones contra Turquía tras la primera entrega a este país de los misiles S-400 rusos. Finalmente, EEUU ha decidido imponer sanciones duras contra Ankara.
Citando fuentes confiables, Bloomberg escribió: “La administración Trump ha decidido aprobar un paquete de sanciones que se impondrán a Turquía tras recibir el viernes 12 Julio el primer envío de misiles S-400 rusos, ignorando las advertencias de Washington”.
Como resultado, el equipo de Trump planificó tres conjuntos de medidas punitivas en base a la Ley para Contrarrestar a los Enemigos de EEUU. Una de las sanciones ya ha sido adoptada. Estas fuentes, por supuesto, no especificaron qué paquete se eligió específicamente.
“EEUU tiene la intención de anunciar a finales de la próxima semana estas sanciones después del aniversario del fallido golpe de estado del 15 de julio de 2016 contra Recep Tayyip Erdogan, el presidente turco, para evitar cualquier acusación de apoyo a este golpe”, dijo una de estas fuentes, que agregó:
“Este paquete de sanciones fue diseñado después de días de discusiones y sesiones intensivas de trabajo en la Casa Blanca, el Departamento de Estado y el Consejo de Seguridad Nacional de EEUU, y después de muchas advertencias de Washington a Ankara para que no comprara el S-400”.
La Casa Blanca se abstuvo de comentar las declaraciones de estas fuentes.
Fuentes dentro del Departamento de Estado de EEUU habían amenazado previamente con separar a Turquía del proyecto de fabricación conjunta del F-35 y no entregar estos aviones a Turquía. De hecho, los pilotos turcos residentes en una base de Arizona ya no pueden acercarse al avión.
Tres aviones de carga rusos que transportaban componentes del sistema de misiles ruso S-400 llegaron el viernes a la Base Aérea de Mürted cercana a la capital turca, Ankara.
En diciembre de 2017, Turquía anunció que había finalizado el contrato de compra de 2 sistemas S-400 por un valor de 2.500 millones de dólares. Según los términos de este contrato, Turquía pagó el 45% del costo en efectivo, del cual ya se ha pagado una parte, y el 55% restante en forma de crédito.
Source: Agencias