El disgusto es notorio en medios sociales libaneses al aplazarse el proceso judicial contra Amer al Fakhouri, ex jefe del campo de concentración de Jiam, a la espera de un abogado estadounidense para la defensa.
Al Fakhouri dirigió ese recinto penitenciario durante varios años y se le achacan torturas, maltratos y desmanes contra los cinco mil recluidos que estuvieron en esa instalación de 1985 a 2000.
Perteneciente al desaparecido Ejército del Sur de Líbano, al ahora encarcelado se le acusa de colaboración con Israel durante la época de la ocupación (1982-2000), porque actuó bajo mandato del régimen usurpador de Palestina.
En 1998, la justicia libanesa lo sentenció a 15 años de prisión que nunca cumplió, porque había emigrado a EEUU, donde obtuvo la ciudadanía del país norteño.
Pese a esa condena, la semana pasada, el acusado ingresó sin problemas al país como resultado de lo cual hubo críticas generalizadas, en especial de exreclusos y sus familiares.
Al menos 10 personas murieron y otras nunca más volvieron a ser las mismas a causa de las sesiones de interrogatorio a que los sometieron en la prisión de la sureña ciudad de Jiam.
Ante la presión popular y protestas masivas, las autoridades detuvieron a Al Fakhoury y lo remitieron a un tribunal militar.
En los interrogatorios confesó que cooperaba y trabajaba para Israel, un delito muy sensible en este país.
Source: PL