Una explosion en la capital egipcia mató el domingo a 25 personas e hirió a otras 48, señaló la televisión estatal del país.
La explosión tuvo lugar durante la celebración de una misa en la Catedral Copta de El Cairo el domingo. La bomba estaba colocada en la parte reservada a las mujeres. La mayor parte de las víctimas son, pues, mujeres y niños.
Los coptos representan el 10% de la población de Egipto.
Ningún grupo o individuo ha reivindicado la responsabilidad por los atentados mortales.
Justo dos dias antes, un ataque terrorista contra la comisaría de Al Haram, en el oeste de El Cairo, causó la muerte a seis policías y heridas a siete personas.
Poco después, la explosión de una bomba al paso de un vehículo policial en la provincia de Kfar al Sheij, en el Delta del Nilo, causó un muerto y dos heridos.
El aumento de los atentados en Egipto tiene lugar en un contexto de creciente tensión entre El Cairo y Riad, por un lado, y El Cairo y Doha, por otro. Cabe recordar que Arabia Saudí y Qatar son los principales promotores de los grupos extremistas de tendencia wahabí en el mundo. En este sentido, ambos parecen querer castigar a Egipto por sus recientes gestos de aproximación a Siria y su negativa a seguir sus políticas en la región.
Esto es al menos lo que piensa el presidente de la Comisión de Defensa y Seguridad Nacional del Parlamento egipcio, Yahia al Kadwani, que acusó a Qatar de ser “el principal apoyo financiero y mediático” de los terroristas que actúan en Egipto y más concretamente los que atentaron contra la Catedral Copta.
“Es a través de su cadena de televisión Al Yazira y de sus miles de millones de dólares que Qatar busca alcanzar sus objetivos nefastos en Egipto y es a este régimen al que incumbe la responsabilidad de este atentado (contra la Catedral)”, dijo Kadwani, que añadió que las autoridades egipcias llevarán a cabo una “investigación profunda” de estos atentados y pondrán en marcha medios eficaces para luchar contra el terrorismo.
Source: Prensa Árabe