Un informe británico entregado recientemente a la Cámara de los Comunes señala que Rusia ha tomado medidas para reducir lo que considera amenaza de la OTAN y sus aliados, que han desplegado fuerzas cercanas a su frontera en el Báltico así como elementos de un sistema antimisil en Rumanía y Polonia.
El informe sugiere que Rusia ha reforzado sus capacidades militares en la Península de Kola, cerca de Finlandia, y en el enclave ruso de Kaliningrado, situado entre Polonia y Lituania. En ambos lugares el arma elegida de respuesta son los misiles Iskander.
El informe añade que Rusia se ha visto obligada a desplegar estos misiles en dichas zonas con el fin de promover la defensa de estas regiones frente a un posible ataque de la OTAN.
El informe también afirma que Rusia ha desplegado estos misiles en Siria. El documento señala que Rusia mantiene una superioridad militar en Siria frente a los países de la coalición liderada por EEUU y esto viene dado en parte porque coordina sus operaciones en el país con las autoridades sirias.
El Iskander es un misil de corto alcance controlado durante todo su recorrido y dotado de una ojiva integrada, nuclear o convencional, de hasta 700 kgs, que no se separa.
El misil no sigue una trayectoria enteramente balística, ya que durante su fase terminal puede realizar giros bruscos y lanzar señuelos. Además nunca abandona la atmósfera terrestre. El Iskander consigue un alto grado de precisión y capacidad para superar las defensas antimisiles.
Source: Agencias