Para muchos analistas, el hecho de que Jordania, después de haber mantenido relaciones durante mucho tiempo con los israelíes, haya organizado un ejercicio militar que simule un ataque israelí en la frontera occidental del reino solo puede plantear grandes preguntas: ¿una guerra israelo-jordana es posible?
Lo cierto es que Jordania ha visto con desmayo el nuevo apoyo de la administración Trump al régimen israelí en gran número de temas comenzando por su reconocimiento de la ciudad palestina ocupada de Al Quds (Jerusalén) como capital de “Israel” o el reciente apoyo del secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, a los asentamientos israelíes en Cisjordania. Jordania ha rechazado también el fallido plan del “acuerdo del siglo” promovido por Trump y su yerno, Jared Kushner.
Esto ha llevado a un considerable deterioro de las relaciones bilaterales. Una muestra de ello es la decisión de Jordania de poner fin al arrendamiento a los israelíes de dos territorios suyos, según venía recogido en el tratado bilateral de 1994. Ahora surge una pregunta: en caso de un conflicto entre el reino hashemí e “Israel”, ¿quién ayudaría a Ammán? Esta cuestión inquieta a los analistas y políticos israelíes.
El Instituto de Investigación Beguin-Sadat de Tel Aviv ha abordado en un informe reciente la “presencia de fuerzas pro iraníes” en el triángulo fronterizo entre Iraq, Siria y Jordania, donde ha habido tensiones crecientes entre el Hashid al Shaabi, por un lado, y los estadounidenses, por el otro. “Israel” necesitará monitorear de cerca las actividades iraníes en la región, con Jordania cada vez más interesada en el eje iraní, que continúa consolidando su presencia y creando nuevos corredores terrestres que unen Iraq con Siria”, señala el informe.
Si bien Irán y Jordania no tienen buenas relaciones, las tensiones con “Israel” pueden no dejarle a Ammán otra opción y empujarlo al campo anti-Israel. Además, Jordania y Turquía se están acercando cada vez más, lo que parece muy preocupante para el régimen de Israel, que teme también una creciente presencia turca en la región. Si el reino entra en guerra con “Israel”, Turquía e Irán podrían ofrecerle ayuda y apoyo.
“Israel” estaría entonces bien rodeado de verdad. Sería un medio ideal de presión para evitar que los palestinos de Cisjordania sean expulsados. Jordania podría ofrecer un nuevo corredor para conectar Irán con Cisjordania, según el informe del Instituto de Investigación Beguin-Sadat.
Según los informes, el 1er Batallón Mecanizado del Mando Central jordano, miembro de las Fuerzas Armadas del país, realizó un ejercicio el martes y miércoles pasado. El rey jordano Abdulá II, que vestía uniforme militar, junto con una gran cantidad de altos responsables del gobierno jordano y parlamentarios, supervisó las maniobras llamadas “Espadas de Karama”, que tenían el objetivo de evitar cualquier invasión de agresores y simular una guerra con el régimen israelí.
Según las agencias oficiales de noticias jordanas, las maniobras simularon una “batalla defensiva” con la participación de varios cuerpos del Ejército, aviones de combate y helicópteros “con el objetivo de destruir la vanguardia y los puentes del enemigo” que puedan servir como puntos de paso “al territorio jordano”.
El Jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Jordania, General Yousef Huneiti, dijo: “Tendremos otros preparativos en el futuro cercano. Aumentaremos nuestras capacidades militares a través de ejercicios conjuntos y el apoyo de diferentes elementos de las Fuerzas Armadas. Nuestras fuerzas militares están listas para defender nuestra patria y lucharán contra cualquiera que se atreva a dañar la seguridad de nuestro país.”
La prensa israelí ha visto estas maniobras como una advertencia y un mensaje de Jordania. En referencia a estas maniobras, el Canal 13 de televisión israelí anunció que “este ejercicio ha tenido repercusiones de gran alcance en los medios jordanos y que parece estar enviando un mensaje político a Israel sobre la profunda crisis que divide a las dos partes”.
Source: Press TV