Las autoridades estadounidenses admiten que no tienen poder sobre la construcción del gasoducto Nord Stream 2, dijo la agencia Bloomberg, refiriéndose a sus fuentes. El 17 de diciembre, el Congreso de EEUU aprobó sanciones contra el proyecto, visto por Washington como un intento de Moscú de extender su influencia en Europa.
Dos fuentes de la administración admitieron ante Bloomberg que los estadounidenses casi no tienen influencia sobre Rusia y Alemania, los principales promotores del Nord Stream 2.
Como recordatorio, este gasoducto, con una capacidad de 55.000 millones de metros cúbicos por año, conecta a estos dos países a través del fondo del Mar Báltico. Se estima que estará operativo entre abril y junio de 2020.
Otros proyectos específicos
Una de las fuentes agregó que incluso si el Senado de EEUU aprueba el presupuesto de defensa del país para el año fiscal 2020, que prevé estas sanciones, no cambiará mucho.
Pero EEUU planea evitar que Rusia implemente otros proyectos de energía.
Expertos rusos y occidentales han enfatizado que tales medidas de Washington buscan transportar su propio gas natural licuado al mercado europeo, que, sin embargo, es mucho más costoso que el gas ruso.
Source: Sputnik