Poco después de que el Ministerio de Salud del Líbano anunciara el primer caso confirmado de coronavirus en el país a principios del mes pasado, las facciones locales anti-Hezbolá buscaron politizar este tema.
El ministerio hizo el anuncio el 21 de febrero, diciendo que el paciente era un peregrino que regresó de Irán. Estas facciones, junto con sus medios de comunicación afiliados, apuntaron a la Resistencia y a la República Islámica, culpándolos por “enviar” el virus contagioso al Líbano.
“Gracias Irán por permitir que un avión que transportaba personas infectadas con coronavirus ingresara a nuestro espacio aéreo”, dijo el canal MTV, que está cerca del Partido de las Fuerzas Libanesas, de Samir Geagea, al comenzar su boletín de noticias de ese día.
“Como si lo que Irán ofrece al Líbano no fuera suficiente, entonces envió al coronavirus para completar su favor”, dijo el canal libanés, preguntándose: “¿Es esta la cooperación? ¿Es este el apoyo que promete Irán?”
A medida que la campaña de propaganda contra Irán ha continuado, surgieron informes de medios locales, que mostraron las cifras reales y revelaron cómo el virus mortal se había extendido realmente en el país.
Primer caso del virus llegado al Líbano desde Italia
El miércoles (18 de marzo), el diario libanés Al Akhbar reveló que el primer caso de coronavirus fue transmitido por un monje que estaba en Italia y regresó al Líbano entre el 15 y el 20 de febrero, pocos días antes de que se anunciara el caso procedente de Irán.
Maysam Rizk, de Al Akhbar, informó que un equipo encargado por el Ministerio de Salud de monitorear la pandemia ha estado siguiendo este problema. Ella dijo que el monje, cuya identidad aún es desconocida o al menos no anunciada, participó en una ceremonia religiosa en el Monasterio de San José en Achrafieh, Beirut.
Rizk agregó que el monje transmitió la enfermedad a varios otros monjes, y señaló que el monasterio guardó silencio sobre el asunto de la ceremonia religiosa.
Una de las muertes causadas por el coronavirus fue la maestra Marun Karam, quien contrajo la enfermedad del monje, según el informe.
Para el Líbano, no importa si el coronavirus fue transmitido por pasajeros que estaban en Irán o en Italia. Lo que realmente importa es cómo los libaneses pueden combatir esta enfermedad, lo cual requiere dejar de lado los intentos de politizar este asunto y de conseguir réditos políticos de la enfermedad.
Source: Medios libaneses