Recientemente, Irán ha presentado nuevos drones de combate y reconocimiento con un alcance de 1.500 kilómetros y una altitud de vuelo de cerca de 5.000 metros, escuadrones de Ababil-3 y Karrar, capaces de lanzar misiles y bombas de 250 kilos y todo esto junto con dos súper radares puestos en servicio el 19 de abril y que forman parte de los elementos de la defensa antiaérea iraní.
El comunicado de prensa de CGRI con fecha del 19 de abril que advierte a las fuerzas estadounidenses en el Golfo Pérsico proporciona algunas indicaciones. En alusión al choque del 15 de abril donde 11 lanchas rápidas iraníes respondieron a la provocación de la Marina de los EEUU, el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica aconseja a los estadounidenses que no confundan “el Golfo Pérsico con los estudios de Hollywood” y especialmente que “no violen la ley de navegación en aguas territoriales iraníes y en aguas regionales”, ya que, en otro caso, “cualquier cosa puede pasar”.
Como prueba, este lunes 20 de abril, un nuevo vídeo mostró un nuevo incidente entre una patrulla estadounidense y otra marítima del CGRI, no lejos del Estrecho de Ormuz. La conversación entre el patrullero iraní y el barco estadounidense tuvo lugar en “persa”, una señal de que en este contexto ardiente, los estadounidenses no quieren correr ningún riesgo. Después de recibir una advertencia real, el barco de EEUU cambió el rumbo. Pero este tipo de advertencia es solo la punta del iceberg, ya que las Fuerzas Armadas iraníes han dominado la escena desde hace mucho tiempo y son capaces de cortar de raíz cualquier acción hostil en el Golfo Pérsico.”
En su edición del 16 de abril, The National Interest se refiere a “unidades navales espías estadounidenses” que, colocadas en el Golfo Pérsico, dicen “recopilar información” sobre las “actividades balísticas iraníes”.
La publicación habla de un pequeño barco espía en el Golfo Pérsico, probablemente destinado vigilar el lanzamiento de misiles iraníes. Es el USNS Invencible. Técnicamente hablando, es un barco de 75 metros de largo y unas 2.800 toneladas pertenecientes al Comando de Transporte Marítimo Militar, la rama cuasi civil de la Armada que opera el logística militar de EEUU. Lo más importante es su radar sofisticado de doble banda X y S llamado Gray Star que pertenece a Fuerza Aérea. Su misión es “monitorear los lanzamientos de misiles y recopilar datos”.
Dada la catástrofe del ataque con misiles balísticos iraníes contra Ain al Asad y el impacto de este ataque en la estrategia estadounidense en Iraq, hay que decir que el USS Invincible no hizo su trabajo demasiado bien y el ataque balístico del 8 de enero causó una estampida total en las filas de las tropas estadounidenses. Por lo demás, este barco que The National Interest describe como un “misterioso espía invisible” ya pasó un mal tiempo cuando en 2017 se encontró cara a cara con la unidad de patrulla Zulfaghar del CGRI que lo obligó a desviar su rumbo.
Source: Press TV
