Rusia y Siria han llevado a cabo ejercicios navales con el objetivo de entrenarse para neutralizar posibles acciones de sabotaje en el puerto sirio de Tartús, en la costa mediterránea.
El personal militar ruso y sirio organizó las maniobras para responder a posibles acciones de sabotaje en el puerto sirio de Tartús, que alberga una base naval rusa, dijo el comandante de la base, Viacheslav Rodionov, citado por Sputnik el lunes 25 de mayo.
“Durante las maniobras tácticas conjuntas, las fuerzas navales sirias y rusas se entrenaron en la defensa de la base de Tartus”, dijo Rodionov a los periodistas, añadiendo que se habían logrado todos los objetivos establecidos.
El personal militar de ambos países neutralizó a cuatro buzos que simularon el sabotaje con la instalación de un dispositivo explosivo en el fondo marino. Dos de ellos fueron eliminados y otros dos trataron de escapar pero fueron interceptados y llevados a la costa, donde la policía militar los esperaba. Lo mismo sucedió con los cómplices, que habían intentado acceder a la base naval en un bote de alta velocidad.
Las maniobras incluyeron lanchas rápidas Raptor rusas, barcos Kinel antisabotaje y el barco Ivan Antonov, utilizado en operaciones de desminado, así como lanzadores sirios equipados con misiles.
En 2017, Moscú y Damasco firmaron un acuerdo para crear una base para la Marina rusa en Tartús por un período de 49 años.
También el lunes 25 de mayo, RT anunció la apertura oficial de la ruta internacional M-4, que une el noreste de Siria con el oeste, así como con las regiones centrales y costeras del país.
Dado que los terroristas afiliados a Ankara operan cerca de la autopista los militares rusos se comprometen a garantizar su seguridad y evitar cualquier provocación, según un alto funcionario militar ruso desplegado en el aeropuerto internacional de Qamishli.
Source: Press TV