El canciller Sameh Shukri aseguró el martes que Egipto está dispuesto a conversar de buena fe para alcanzar un acuerdo en torno a la presa etíope sobre el Nilo Azul, pese al fracaso de la última ronda de negociaciones.
El titular del Ministerio de Relaciones Exteriores aclaró que el pedido de la parte egipcia para que el Consejo de Seguridad de la ONU intervenga en el asunto no está en contradicción con su voluntad de diálogo, reseñó Ahram on line.
Egipto acudió a ese órgano luego de que Etiopía reiterara su decisión de comenzar a llenar el depósito sin conseguir antes un pacto con los países aguas abajo (corre de sur a norte), incluido también Sudán.
La nación árabe que abriga a más de 100 millones de habitantes y depende casi por completo del Nilo para su agricultura y el abasto de agua potable, sin olvidar su protagonismo en el turismo, teme que la represa disminuya drásticamente el flujo del río.
Por ese motivo insiste en establecer pautas para el llenado y el régimen de operación, sobre todo en épocas de sequía severa o prolongada.
Mientras que las autoridades etíopes apuestan al megaproyecto para exportar energía al resto de continente y consideran desmesuradas las preocupaciones del Cairo.
Estamos dispuestos a reanudar las conversaciones de inmediato si Addis Abeba declara que cumplirá con sus obligaciones internacionales en lo referido a abstenerse de emprender acciones de forma unilateral como llenar el embalse, subrayó Shukri.
Las recientes pláticas facilitadas por la delegación sudanesa concluyeron el 17 de junio sin un consenso, entonces Egipto culpó a Etiopía de intransigente y de esquivar la firma de un trato legalmente vinculante.
En tanto Sudán respaldó la postura del estado norteafricano, eminentemente desértico y cuya vida y prosperidad giran en torno al torrente.
En respuesta, Addis Abeba acusó al país de los faraones de mantener una actitud colonial y de obstaculizar lo que considera su derecho natural a usar tal recurso.
Egipto asume la defensa del Nilo como una cuestión existencial por lo que alertó al Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU)para que empleara sus buenos oficios y buscara la reactivación de la mesa de concertación, enfatizó un comunicado oficial.
En su defensa alega, además, que Etiopía posee otras fuentes de agua para su desarrollo.
Las primeras reuniones para resolver la espinosa polémica datan de 2011, además del reciente fiasco de los diálogos virtuales, las tres naciones fracasaron igualmente en su intento por lograr un trato favorable para todos en Washington, pues el texto conclusivo de la cita fue reprobado por el territorio del cuerno africano.
El Nilo, llamado Blanco en ciertos tramos, recibe en Sudán las aguas del Azul nacido en Etiopía y sobre el cual se edifica el dique.
“Se lo digo al pueblo etíope. Apreciamos el desarrollo de ese país, pero deben respetar la vida en Egipto, manifestó el presidente Abdel Fattah el Sisi en una alocución el sábado.
Source: PL