Cientos de personas organizaron una manifestación en la provincia de Hasaka, en el noreste de Siria, para protestar contra el despliegue militar estadounidense y turco en sus áreas, además de las nuevas sanciones financieras que Washington impuso a su país a principios de este mes.
El martes, los residentes locales de la aldea de Hamu portaron pancartas y corearon consignas para condenar las presencia de las tropas estadounidenses y turcas, y denunciaron la llamada Ley César contra Siria, que entró en vigencia el 17 de junio.
Los manifestantes pidieron un frente unificado frente al bloqueo económico injusto impuesto por EEUU y sus aliados en Siria y los posibles impactos de las sanciones de la Ley César.
Los manifestantes señalaron que las medidas coercitivas de EEUU han afectado al pueblo sirio y a sectores vitales del país, en particular el sector de la salud, y prendieron fuego a banderas estadounidenses.
Las tropas ocupantes estadounidenses lanzaron entretanto una operación de helicóptero en Ash Shahil, una localidad en las afueras de la provincia de Deir Ezzor. Helicópteros estadounidenses sobrevolaron las casas de este pueblo resistente antes de que las fuerzas desembarcaran y procedieran a realizar registros casa por casa y arrestar a los habitantes.
Unas horas antes, fue el turno de los habitantes de Garanij, no lejos de Al Mayadin y Albu Kamal, de salir a las calles, quemar llantas, bloquear las carreteras al paso de las Fuerzas Democráticas Sirias, apoyadas por EEUU, y denunciar sus abusos. También mostraron su condena a la Ley César.
Estas manifestaciones tuvieron lugar simultáneamente con una operación del Ejército sirio el lunes 29 de junio, que atacó varias bases del grupo terrorista Daesh y desactivó docenas de bombas, minas y explosivos. El Ejército sirio atacó a una de las principales redes de tráfico terrorista desde Iraq a Siria, redes que, como todos saben, están controladas por oficiales estadounidenses.
Pero eso no es todo: otro evento bastante significativo ocurrió el lunes. Una delegación rusa visitó el campo petrolífero de Al Ward, en el este de Deir Ezzor, en la orilla oeste del Éufrates. Una patrulla militar acompañó a la delegación rusa a visitar el campo petrolífero controlado por el Ejército sirio y las fuerzas rusas.
Para muchos analistas, esta combinación de eventos, a saber, manifestaciones anti-estadounidenses, operaciones militares del Ejército sirio y sus aliados, patrullas alrededor de los campos petroleros que los estadounidenses codician y todo en el contexto de las operaciones de helicópteros estadounidenses contra la población solo significa una cosa: el frente anti-estadounidense en Deir Ezzor está bien activo. Esto podría estar conectado con la reciente visita del comandante en jefe de la Fuerza Al Quds del CGRI a Albu Kamal. Durante su visita, este último prometió continuar luchando contra Daesh y, a través de esta organización terrorista, contra EEUU e “Israel”.
Estos acontecimientos llegan en un momento en que Faisal Meqdad, viceministro de Asuntos Exteriores sirio, transmitió un mensaje muy significativo a todos los vecinos de Siria. “Al igual que la década pasada, Siria continuará frustrando las conspiraciones estadounidenses en diferentes niveles y el pueblo sirio acompañará al gobierno en este camino. Pero Siria será además ayudada por sus vecinos, porque la Ley César también los ataca. Siria, en coordinación con países amigos, luchará contra esta conspiración”.
Source: Press TV