La administración estadounidense ha impuesto sanciones a la líder de Hong Kong y a varios otros funcionarios clave de por una ley de seguridad que China promulgó para la región semiautónoma a fines de junio.
El Departamento del Tesoro anunció el viernes que congelaría los activos en EEUU de la directora ejecutiva Carrie Lam y otros 10 altos funcionarios de Hong Kong, en el caso de que los tengan, y también penalizó cualquier transacción financiera de estadounidenses con las personas mencionadas anteriormente.
El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, afirmó en un comunicado que Lam fue sancionada porque “es directamente responsable de implementar las políticas de Pekín de supresión de la libertad y los procesos democráticos”.
Mnuchin continuó diciendo que “EEUU apoya al pueblo de Hong Kong y utilizaremos nuestras herramientas y autoridades para apuntar a aquellos que socaven su autonomía”.
Además, el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, defendió las sanciones, acusando a Pekín de violar su promesa de autonomía que había hecho a los hongkoneses antes de que se independizaran del dominio británico hace más de dos décadas.
Tras las protestas antigubernamentales del año pasado, Pekín introdujo a fines de junio una nueva ley de seguridad nacional que penaliza la sedición, la secesión y la subversión contra el continente. La ley también allana el camino para que las instituciones de seguridad nacional chinas operen en la ciudad por primera vez desde 1997, cuando Hong Kong regresó del dominio británico al chino. Estos delitos se castigan con penas de hasta cadena perpetua.
Las sanciones de EEUU “salvajes e irrazonables”
Mientras tanto, el secretario de Comercio de Hong Kong, Edward Yau, dijo el sábado que la medida de Washington es “salvaje e irrazonable”.
Yau advirtió sobre las posibles consecuencias y dijo que las medidas unilaterales de EEUU afectarían en última instancia a las empresas y negocios estadounidenses en el centro financiero.
“Este tipo de sanción, si se dirige a funcionarios o líderes de otro país, es salvaje, desproporcionada e irrazonable”, dijo, y agregó: “Si EEUU lleva a cabo unilateralmente este tipo de acción irrazonable, al final esto afectará a las empresas estadounidenses.”
La oficina de China en Hong Kong también censuró la decisión de Washington, calificándola de “bárbara y grosera”.
“Las malas intenciones de los políticos estadounidenses de apoyar a las personas que están en contra de China y que están arruinando Hong Kong se han puesto claramente de manifiesto”, dijo la Oficina de Enlace de Pekín en Hong Kong en un comunicado.
Las sanciones de EEUU se produjeron un día después de que el presidente Donald Trump emitiera órdenes ejecutivas que prohíben que las aplicaciones de redes sociales TikTok y WeChat operen en el país si sus empresas matrices de propiedad china no las venden en un plazo de 45 días.
Source: Agencias
