Las operaciones contra las fuerzas de ocupación estadounidenses y sus aliados kurdos de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) han experimentado un gran aumento en los últimos días en el noreste de Siria. En el contexto de un movimiento de protesta que está cobrando impulso entre los habitantes de esta región y especialmente entre las tribus sirias que han declarado la resistencia popular contra esta ocupación y sus colaboradores.
Una base estadounidense atacada
El martes 18 de agosto, y por primera vez en Siria, una base estadounidense fue blanco de un ataque con cohetes. Ubicada cerca del campo de gas de Koneko (Conoco) en la provincia de Deir Ezzor, es el hogar del mayor contingente estadounidense y la sede una de las mayores empresas productoras de petróleo estadounidenses, informa Avia-pro. EEUU ha establecido una docena de bases militares ilegales en el norte del Éufrates, a pesar de las protestas oficiales sirias.
Este ataque se produjo el día después de un enfrentamiento entre militares estadounidenses y sirios en torno a un puesto de control militar sirio cerca de la ciudad de Qamishli, en la provincia de Hasaka, durante el cual, según informes, hubo muertos y heridos de ambos lados, según la agencia siria Sana.
El convoy estadounidense que venía de la localidad de Tal Barak, controlada por las FDS, intentó forzar el paso en este puesto ubicado a la entrada de la localidad de Qamishli, donde también hay una base aérea militar rusa. Entonces, los soldados sirios dispararon contra el convoy y se produjo un intercambio de disparos. Inmediatamente después, helicópteros de ataque Apache estadounidenses atacaron el puesto de control matando a un soldado sirio.
El Ejército sirio junto a las tribus
“Estas escaramuzas entre unidades del Ejército sirio y un convoy de fuerzas de ocupación estadounidenses representan un importante punto de inflexión en las reglas del juego y de la confrontación con los estadounidenses en el noreste. Esta confrontación será el detonante que incendiará la región contra los estadounidenses y las FDS”, comentó el experto militar sirio, el general Ali Maksud, a la agencia rusa Sputnik.
Según él, este incidente muestra que el Ejército sirio está en alerta para apoyar la resistencia popular, como había prometido el presidente sirio, Bashar al Assad.
“Los estadounidenses no soportarán los ataques de la resistencia popular y veremos en los próximos días un gran cambio en la posición estadounidense en favor de la retirada” de sus fuerzas, pronosticó Maksud.
Operaciones contra las FDS
Según Sana, el lunes 17 de agosto, un IED (explosivo situado junto a la carretera) fue detonado cuando una patrulla de las FDS pasaba por Al Shaafat, también en la provincia de Deir Ezzor. El ataque fue reconocido por un funcionario de la coalición internacional que no dijo si hubo muertos o heridos.
El día anterior, un cruce controlado por las FDS en la localidad de Al Sur, en la provincia norteña de Deir Ezzor, fue objeto de un ataque con ametralladoras.
El jueves 13 de agosto, 11 milicianos de las FDS murieron o resultaron heridos por disparos de desconocidos dentro del campamento de Al Hul, ubicado al este de la ciudad de Hasaka y controlado por las milicias kurdas.
El 9 de agosto, un convoy de las FDS que se dirigía hacia el campo petrolífero de Al Omar fue atacado en el área de Al Shadadi. Tres de sus vehículos y un camión que transportaba equipo militar fueron destruidos.
Hay que tener en cuenta que los estadounidenses y sus colaboradores kurdos controlan cuatro principales campos petroleros sirios, a saber, Al Omar, Tanak, Al Yafra y Conoco, que totalizan el 80% del petróleo del país.
La ira de las tribus
La mayoría de estas operaciones fueron planeadas por elementos de las tribus sirias de Deir Ezzor, incluidos Al Akidat, Zabid, Al Shuhail y Al Huwaij, quienes se armaron contra los estadounidenses, creando un poderoso ejército tribal. Se habían manifestado varias veces en Deir Ezzor exigiendo la salida de las fuerzas estadounidenses acusadas de saquear los recursos de Siria y apoyar los abusos cometidos por las milicias kurdas contra ellos.
Ellos acusan a las FDS de sitiar sus pueblos y ciudades, secuestrar a sus hombres y mujeres jóvenes y atacar a sus líderes tribales y notables. En los últimos meses, varios líderes tribales han sido liquidados, el más reciente de los cuales es Sheij Amtashahr al Hafl de la tribu Al Akidat, que fue asesinado hace dos semanas.
Las tribus sirias también acusan a las FDS de haber apropiado de sus propiedades y tierras, de saquear las riquezas de la región de Al Yazira, una rica zona agrícola ubicada entre el Éufrates y el Tigris, y de quemar sus campos de trigo.
Últimos acontecimientos según SANA: dos milicianos de las FDS han sido muertos en los últimos dos días. El primero el miércoles 19 de agosto en el campamento de Al Hul, donde miles de residentes están sitiados. El segundo, este jueves 20 de agosto en la localidad de Al Basirat, en la provincia de Deir Ezzor.
Source: Diversas