La Sociedad Islámica Nacional Al Wefaq pidió a las Naciones Unidas que intervengan en el impulso desenfrenado del reino para profundizar sus relaciones con el régimen israelí, diciendo que la medida no cuenta con el consentimiento de la población.
El mayor grupo de oposición de Bahrein emitió la declaración el domingo, ya que se espera que las dos partes firmen un “comunicado conjunto sobre el establecimiento de relaciones pacíficas y diplomáticas” durante una visita de las delegaciones israelí y estadounidense a la capital de Bahrein, Manamá.
La medida marca un gran paso adelante en la formalización de los antiguos lazos de Manamá y Tel Aviv después de un evento del 15 de septiembre en la Casa Blanca durante el cual Bahrein y los Emiratos Árabes Unidos firmaron acuerdos de “normalización” con el régimen ocupante.
Todas las facciones palestinas, además de innumerables figuras y organismos musulmanes independientes, han criticado unánimemente la medida de los EAU y Bahrein calificándola de puñalada en la espalda de la nación palestina y un intento promovido por EEUU y dirigido contra la causa palestina y la lucha del pueblo palestino para poner fin a la ocupación y agresión israelí.
Quienes se oponen al acercamiento dicen que la medida ha sido tomada por un puñado de autoridades no electas en Manamá y Abu Dhabi que no están cualificadas para representar la opinión de la comunidad árabe y musulmana de millones de personas en el mundo.
“Más del 95% de los habitantes de Bahrein están en contra del acuerdo y la normalización con los sionistas” y se da en ausencia de cualquier autoridad que represente al pueblo”, dijo Al Wefaq, dirigiéndose al secretario general de la ONU, Antonio Guterres.
“Pedimos al secretario general y a la comunidad internacional que pidan al régimen de Bahrein que permita a los bahreiníes dar su última palabra sobre el acuerdo entre el régimen de Bahrein y la ocupación sionista”, agregó.
“El pueblo de Bahrein debe expresar su opinión sobre este acuerdo ilegal”, decía el comunicado, que lo califica de inconstitucional y contrario a los “valores patrióticos y nacionales”.
El movimiento dijo que otra razón de la ilegalidad del acuerdo era que Manamá lo estaba llevando a cabo mientras reprime a todas las instancias de oposición en casa.
Source: Agencias