El jefe de una misión internacional de observadores a las elecciones en EEUU acusó al presidente Donald Trump de un “flagrante abuso de poder” después de sus acusaciones de fraude en las elecciones y sus afirmaciones que se estaban manipulando estas últimas para que no ganara.
La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), que supervisa las elecciones en todos los países occidentales, expresó su preocupación por los intentos de la campaña de Trump para detener el conteo de votos, añadiendo que la elección está “empañada por la incertidumbre jurídica y los intentos sin precedentes de socavar la confianza pública en las instituciones.”
El candidato presidencial demócrata de EEUU, Joe Biden, se acerca a los 270 votos electorales luego de victorias clave en Michigan y Wisconsin, mientras que Trump exigió un recuento y amenazó con emprender acciones legales.
Las victorias en esos estados del medio oeste le dieron a Biden un impulso crítico en la carrera por obtener el número mágico necesario para ganar la Casa Blanca. Trump se está quedando atrás, aunque todavía es pronto para declarar un ganador.
“Lo más inquietante fue que con la fanfarria presidencial de la Casa Blanca, es decir, con todas las insignias del poder, el comandante en jefe estadounidense pidió el fin del conteo de votos por su supuesta victoria”, dijo Michael Georg Link, jefe de la misión de observación electoral de la OSCE.
“Eso fue un gran abuso de poder”, dijo, y agregó que las “afirmaciones de fraude de Trump son infundadas”.
Añadió que si bien la elección fue “reñida y competitiva”, con un alto grado de participación de los trabajadores electorales y los ciudadanos, “las acusaciones infundadas de deficiencias sistemáticas, especialmente por parte del presidente en ejercicio, incluso en la noche de las elecciones, dañan la confianza pública en las instituciones democráticas”.
“Nadie, ningún político, ningún funcionario electo, debería limitar el derecho de voto de la gente”, dijo Link, refiriéndose a los intentos de Trump de suprimir la votación.
“Después de una campaña tan dinámica, asegurarse de que cada voto sea contado es una obligación fundamental para todos los poderes del Estado”, agregó.
Trump dijo a sus partidarios en la noche de las elecciones, cuando todavía se contaban los votos, que había habido “un gran fraude en nuestra nación” y prometió impugnar los resultados de las elecciones ante el Tribunal Supremo.
“Estamos en una posición GRANDE, pero están tratando de ROBAR las elecciones”, tuiteó.
Source: Agencias