Después de verse sitiado en su coche por manifestantes haredim (ultraortodoxos) que protestaban contra el servicio militar obligatorio, el comandante del ejército de tierra israelí desenfundó su pistola para apuntar a los manifestantes desarmados debido a la tardía intervención de una unidad especial de policía.
Aterrado, el general Yoel Strick se vio rodeado en su vehículo por una multitud a la entrada de la ciudad de Al Quds (Jerusalén) mientras se preparaba para disparar su arma personal contra los manifestantes que protestaban por el arresto de un estudiante de una yeshiva (escuela judía) que no se presentó en la oficina de reclutamiento para recibir su destino en el Ejército israelí, informó el periódico Yedioth Aharonot.
Más de 2.000 haredim (judíos ultraortodoxos) bloquearon la entrada a la ciudad y rodearon el vehículo del general Yoel Strick que fue rescatado por policías desplegados en la ciudad de Al Quds. Después de que se intensificaron los enfrentamientos, los manifestantes respondieron a la acción policial lanzando botellas incendiarias. Cinco de ellos fueron arrestados.
La situación en los territorios ocupados no favorece en modo alguno al primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu. La ineficacia de su gabinete ante la propagación del Covid-19, la crisis económica generalizada y el declive de la popularidad de Netanyahu involucrado en casos de corrupción explican las protestas generalizadas en las últimas semanas, en particular fuera de la casa del primer ministro.
A principios de noviembre, el Likud acusó a Irán de “alimentar las protestas” en Israel para “derrocar al gobierno”. La alegación se basó en un anuncio de la red Facebook de que se acababa de bloquear 12 cuentas de Facebook y 307 cuentas de Instagram con contenido anti-Netanyahu administradas desde Irán.
Source: Medios israelíes