Los casos de suicidio han aumentado dentro del “Ejército israelí” después de haber pasado un año entero en alerta máxima.
El ministro de Energía de “Israel”, Yuval Steinitz, dijo que después del asesinato del general Soleimani, el “ejército israelí” estuvo en alerta máxima durante un año. Esta declaración podría verse como una admisión implícita de la participación de “Israel” en el asesinato del ex comandante de la Fuerza Al Quds del Cuerpo de la Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI), el general Qassem Soleimani.
Según el sitio de información y análisis político Mardom News, las declaraciones de Yuval Steinitz también y sobre todo se interpretan como el fracaso de los intentos israelíes de empujar a EEUU, bajo la presidencia de Trump, hacia una guerra contra Irán, un conflicto en el que EEUU podría haberse involucrado en nombre de “Israel” y de ciertos regímenes de la región. Entonces, ¿qué fue lo que más impidió que la administración Trump se inclinara hacia tal escenario? Parecería que desde la perspectiva del presidente saliente de EEUU, una guerra contra Irán y contra el Eje de la Resistencia tendría un resultado incierto. Esta guerra probablemente sería fácil de comenzar, pero sin duda muy difícil de manejar y concluir, y Donald Trump parece estar convencido de ello, agrega el artículo.
En cualquier caso, “el ejército israelí”, que por la misma admisión de los funcionarios político-militares israelíes lleva un año en estado de alerta, pierde cada día un poco más de su supuesta capacidad en términos de personal militar. Según la agencia de noticias Fars News, que cita datos estadísticos publicados por la Dirección de Recursos Humanos de las Fuerzas de Defensa de “Israel”, aproximadamente un tercio de los militares israelíes que murieron en 2020 lo fueron por suicidio.
Las fuentes de información vinculan las altas cifras de suicidios entre los soldados israelíes con las políticas del régimen de Tel Aviv. El suicidio se habría convertido en 2020 en una forma en la que los soldados expresaron su protesta y decepción por los fracasos del ejército y las políticas seguidas por los líderes políticos y militares de este régimen. En un caso informado por los medios israelíes el 21 de diciembre de 2020, el comandante de la Brigada Golani del “ejército israelí”, el teniente coronel Ayoub Kayouf, reprendió a un soldado que se negó a disparar contra un joven palestino en el cruce de una calle en el asentamiento de Kedumim. “El soldado israelí que fue blanco del ataque de un cóctel Molotov de un joven palestino se negó a dispararle porque estaba traumatizado durante el conflicto”, escribieron los medios israelíes.
Según el periódico Haaretz, “el ejército israelí vive bajo una presión mental y psíquica constante debido a la amenaza de la Resistencia, especialmente desde que el secretario general libanés de Hezbolá, Hassan Nasralá, dijo en un discurso reciente que la promesa responder a la muerte de un combatiente del movimiento en Siria seguía siendo relevante”.
Source: Press TV