China parece estar convirtiéndose en un cliente importante de petróleo iraní, mientras se espera que se disparen los niveles de producción de Irán.
Durante el año pasado, China importó un promedio de 306.000 barriles de petróleo crudo de Irán por día (b / d), con un total de 17,8 millones de toneladas. La mayoría de esas importaciones, el 75%, provino indirectamente de Malasia, Omán o los Emiratos Árabes Unidos, según el precio del petróleo.
A medida que aumenta la demanda, se espera que las importaciones chinas de petróleo iraní en marzo alcancen los 856.000 bpd, un aumento del 129% con respecto a febrero.
Se dice que la repentina afluencia de petróleo iraní causó congestión en los puertos cuando se descargaron los petroleros.
Las importaciones de Irán han disminuido significativamente en Asia, particularmente a India, Japón y Corea del Sur, desde 2018 luego de las sanciones impuestas al país bajo la administración Trump. Sin embargo, el aumento de las compras de petróleo iraní por parte de China en los últimos meses sugiere que es probable que esta tendencia cambie bajo la nueva administración de Biden.
Las importaciones a China desde Irán nunca se han detenido, pero ciertamente han disminuido. Sin embargo, según Emma Li, analista de flujo de crudo de Refinitiv, “los volúmenes comenzaron a aumentar desde el último trimestre de 2020, siendo la provincia de Shandong la primera región receptora, lo que indica que las fábricas independientes son los principales consumidores”.
India también ha comenzado a importar petróleo iraní, asumiendo que se reanudará el comercio con Irán. Esto se produce cuando la Compañía Nacional de Petróleo de Irán (NIOC) intenta fomentar nuevas asociaciones en Asia para aumentar su potencial de exportación mediante el aumento de la producción nacional.
Un funcionario del gobierno indio cree que los suministros iraníes volverán al mercado dentro de tres o cuatro meses.
El interés de China en el petróleo iraní va de la mano de la asociación estratégica integral entre los dos países. La iniciativa predice que el comercio entre los dos países alcanzará los 600.000 millones de dólares durante la próxima década.
Además, la Iniciativa de la Franja y la Ruta de China intenta fortalecer los lazos políticos, económicos y estratégicos regionales, con un enfoque en la industria energética.
En acuerdos energéticos recientes con China, a Irán se le permitió realizar transacciones financieras en monedas extranjeras, como el euro, en lugar del dólar estadounidense para contornear las sanciones.
Source: Press TV
