En la parte norte de Siria, se han desplegado sistemas de defensa antiaérea para proteger el territorio contra ataques inesperados de aviones furtivos F-35 y F-22.
Después de que los cazas estadounidenses F-35 y F-22 comenzaron a aparecer cada vez más en las partes oriental y noreste de Siria, se supo que los militares sirios y rusos desplegaron en la parte norte de la república árabe, cerca de la ciudad de Qamishli, defensas antiaéreas que protegen contra ataques inesperados de los cazas furtivos de la Fuerza Aérea de EEUU.
Las imágenes de satélite muestran que al menos cuatro radares y un sistema de misiles de defensa antiaérea Pantsir-S están desplegados en un área relativamente pequeña cerca de la ciudad de Qamishli. Se argumenta que estos sistemas de defensa aérea están destinados principalmente a repeler posibles ataques de EEUU. Además de ellos, otros sistemas de defensa antiaérea también están desplegados en la base aérea de las Fuerzas Aeroespaciales Rusas en Qamishli. Esto indica que la región está completamente protegida contra ataques inesperados.
A pesar de que los radares P-18 son relativamente antiguos, ellos son capaces de detectar cazas furtivos F-35 y F-22. El radar chino JYL-1 proporciona la capacidad de escanear continuamente el espacio aéreo a distancias de hasta 200-250 kilómetros y también está diseñado para detectar objetivos furtivos.
Source: Avia Pro
