El primer ministro camboyano, Hun Sen, ha dado instrucciones al ejército de la nación para que destruya todas sus armas estadounidenses o las arroje a depósitos después de que EEUU impusiera una prohibición de armas al país del este de Asia por sus estrechos vínculos con China y sus presuntos problemas en materia de derechos humanos.
“Ordeno a todas las unidades del ejército que revisen inmediatamente las armas y los artículos militares que Camboya tiene actualmente. (Nosotros) debemos retirar todas las armas y equipos militares estadounidenses, si los hay, y ponerlos en almacenes o destruirlos en consecuencia”, declaró Hun Sen el viernes en una publicación de Facebook.
“(El embargo de armas de EEUU) es un mensaje de advertencia para la próxima generación de camboyanos que dirijan el gobierno de que si quieren un sector de defensa independiente, no utilicen armas estadounidenses”, enfatizó.
Restando importancia a la calidad de los armamentos y equipos militares fabricados en EEUU, el primer ministro camboyano también insistió en que “muchos de los que han usado armas estadounidenses perdieron guerras”, citando a Afganistán como un ejemplo.
Washington impuso un embargo de armas a Camboya el miércoles, citando actividades chinas no especificadas allí, así como supuestas preocupaciones sobre los derechos humanos en el país del Sudeste Asiático.
Según un comunicado oficial emitido, las medidas tomadas por los departamentos de Estado y Comercio de EE.UU tienen como objetivo restringir el acceso a “artículos y servicios de defensa” por parte de las agencias militares y de inteligencia de Camboya.
Los informes de la prensa occidental han acusado al primer ministro camboyano de ser “uno de los socios más cercanos de China en Asia”, alegando además que su gobierno ha estado desmantelando instalaciones en la base de Ream, que fueron construidas parcialmente con fondos estadounidenses y se han utilizado para albergar simulacros militares norteamericanos en la región.
La base de Sihanoukville en el Golfo de Tailandia, añaden los informes, ha sido un problema continuo en las relaciones entre EEUU y Camboya en los últimos años, y Washington “sospecha” que está siendo transformada para su uso por los chinos.
También el mes pasado, Washington impuso sanciones contra dos funcionarios camboyanos por acusaciones de corrupción vinculadas a una base naval financiada por EEUU.
Ante la creciente influencia y el papel de China en los temas políticos, económicos y militares de muchos países, la administración del presidente de EEUU, Joe Biden, ha recurrido cada vez más a medidas hostiles contra Pekín.
Source: Agencias