El más alto juez de Túnez acusó al presidente Kais Saied de socavar la independencia del Poder Pudicial al disolver un organismo judicial superior.
Hablando en la primera reacción pública, el jefe del Consejo Judicial Supremo, Youssef Bouzakher, dijo que la declaración de Saied representaba un intento de someter a los jueces a las instrucciones presidenciales.
“La decisión del presidente es ilegal y una asimilación directa del poder judicial a la presidencia”, dijo citado por medios de comunicación.
Saied disolvió el Consejo Judicial Supremo, que supervisa el desempeño independiente de los jueces del país.
Saied, quien asumió el poder con la promesa de reformas, dijo el domingo que el Consejo Judicial Supremo era “cosa del pasado”.
Acusó a los miembros del consejo de aceptar “miles de millones” en sobornos.
También acusó a los miembros del consejo de retrasar investigaciones políticamente delicadas, incluida una investigación sobre los asesinatos de activistas de izquierda en 2013.
“En este consejo los cargos y nombramientos se venden por lealtades. Su lugar no es el sitio donde están sentados ahora, sino el lugar donde están los acusados”, dijo el presidente y agregó: “No se imaginan el dinero que han podido recibir ciertos jueces, miles y miles de millones”.
La decisión de Kais Saied pone fin a meses de fuertes críticas a los jueces de Túnez y genera temores sobre la independencia judicial.
El mes pasado, el presidente revocó todos los privilegios económicos de los miembros del Consejo Judicial Supremo, que tenía la tarea de garantizar la independencia del Poder Judicial, disciplinar a los jueces y otorgarles ascensos profesionales.
Varios cientos de personas protestaron contra el Consejo el domingo frente a su sede, una manifestación alentada por Saied.
Source: Agencias