Por primera vez, Al Manar TV transmitió nuevas imágenes de vídeo de una reunión entre el mártir Imad Mugniyeh, ex comandante militar de Hezbolá, y dos periodistas libaneses. A esta reunión, que data de unos meses antes de la Guerra de 2006, le siguió un recorrido por un sitio militar clandestino de la resistencia durante el cual les mostró algunos equipos militares, incluidos misiles.
En el marco del programa de televisión de Al Manar Panorama, se realizó una entrevista a uno de los periodistas presentes en este encuentro: el director del diario libanés Al Akhbar, Ibrahim al Amin.
Él relató las circunstancias de este encuentro, en el que estuvo acompañado por el fundador y columnista de este periódico, el gran periodista Joseph Semaha, fallecido en 2007.
Los misiles de la Guerra de 2006
En ese momento, Semaha tenía muchas preguntas sobre la resistencia, como buen conocedor de los asuntos militares, informa Amin, quien indica que habló al respecto con Imad Mugniyeh. Así que este último se ofreció a realizar una gira con los periodistas.
Según él, el comandante en jefe de la resistencia, conocido como Hayy Redwan, sentía simpatía por Joseph y leía sus crónicas… “Tenían en común su simpatía por Abu Ammar (el líder palestino Yasser Arafat, nota del editor)”, subraya. El día de la gira, la mayor parte de la conversación fue entre los dos hombres y, al final, Hayy Imad le mostró misiles que nadie más había visto antes. Son los que se utilizaron en 2006.
“Cuando estalló la guerra de 2006, Joseph estaba seguro de que la resistencia vencería, añade Al Amin.
Él sabía controlar la discusión
Durante la entrevista con Al Manar, el director de Al Akhbar admite que conocía la verdadera identidad del comandante mártir desde hacía mucho tiempo, cuando se reunieron para una entrevista con su periódico. Hayy Imad había sido presentado de forma anónima como un líder de la resistencia, pero inmediatamente lo reconoció y le confesó que conocía su verdadera identidad.
Refiriéndose a las reuniones anteriores que tuvo con el ex comandante de la resistencia, Ibrahim al Amin dijo que “él siempre tenía cosas nuevas que decir”. Para él, “era alguien que siempre estaba buscando alternativas, que planteaba nuevos temas, incluso a los periodistas”.
“Y sabía muy bien qué decir y qué no decir. Se detenía en seco y se negaba a responder cuando no era necesario. Sabía cómo controlar la discusión”.
“Estamos en el corazón de Palestina”
Preguntado por la descripción que le queda del mártir Mugniyeh, 14 años después de su desaparición, Amin cree que no tenía nada del comportamiento tradicional de un líder militar.
“Solo lo vi una vez con uniforme militar. Durante el encuentro filmado no había ningún protocolo que seguir para verlo. Era alguien que parecía una persona ordinaria, pero jugó un papel excepcional. Dependía de ti saber cómo hacerle hablar y aprender de él. Sin embargo, dos cosas se destacan de él: en primer lugar, no podías mentirle; sabía cómo detectar mentiras. Y, en segundo lugar, tampoco podías ir de listo con él”.
Según Amin, lo que distinguió a este hombre es lo que supo hacer. Pudo realizar muchos de sus sueños. “Era un hombre que amaba mucho lo que hacía. Era alguien que tenía un plan. Era un gran soñador”.
“Después del año 2000, la resistencia llevó a cabo un plan de despliegue a lo largo de toda la frontera con la Palestina ocupada… En ese momento, durante la retirada de los israelíes, Hayy Imad dijo: “Ahora estamos en la frontera de Palestina, en el corazón de Palestina”. Y desde entonces estableció una línea de frente a lo largo de Palestina”, recuerda.
Plataformas lanzacohetes desechables
Según Amin, una de las dificultades que tuvo la resistencia con el enemigo israelí fue que sus aviones podían detectar la ubicación de las plataformas de lanzamiento de los cohetes Katiusha.
“Así que se le ocurrió algo así como la fórmula de la lata: “La bebes y la tiras”, en el sentido de que el armamento sería desechable y solo se usaría una vez. La resistencia ha desarrollado plataformas lanzacohetes que se usan una sola vez: cuando se usan, deben estar equipadas con cohetes listos para ser disparados. Un solo resistente se encargaba de lanzarlos una vez dada la orden con los datos transmitidos en clave secreta, para luego marcharse. Esto también debería salvar las vidas de los resistentes”.
“Una vez le mostró a Joseph un enorme equipo que la resistencia había inventado y fabricado. Le explicó muchas tácticas”.
“A partir de ahí, Joseph Sémaha entendió que el arma balística estaría en la vanguardia de los armamentos efectivos en el conflicto contra Israel”.
Palestina, su amor
Según Amin, Palestina fue el gran amor de Hayy Imad. Era un palestino de corazón.
“Recuerdo que en su oficina tenía un gran cartel en el que estaba escrito que hay que eliminar al régimen de “Israel”… Y había fijado los pasos a seguir. Por supuesto, creía que el papel esencial lo debían desempeñar los palestinos.
“Había comenzado a interesarse por los grupos palestinos desde la primera intifada en 1987. Utilizaba todos sus contactos… Para él, los palestinos, especialmente los de 1948, debían quedarse en su tierra cualquiera que fuera el precio a pagar…”
“A partir del año 2000, la cantidad de armas que se envió a los palestinos fue enorme en un corto período de tiempo”, señaló.
Source: Al Manar