Hong Kong ha criticado como “infundadas” y “ridículas” las acusaciones aparecidas en los informes emitidos recientemente por EEUU y el Reino Unido sobre un presunto deterioro de los derechos y libertades democráticos en la ciudad china semiautónoma.
En una declaración el jueves, la administración regional de Hong Kong rechazó las acusaciones formuladas en su contra en los informes e instó a los países extranjeros a “dejar de interferirse en los asuntos internos de China a través de los asuntos de Hong Kong”.
“Nos oponemos enérgicamente a las acusaciones infundadas y ridículas contra el gobierno de la RAEHK (Región Administrativa Especial de Hong Kong) hechas por países extranjeros a través de varios informes”, dice el comunicado.
En una evaluación actualizada de la situación en la región china publicada el jueves, el gobierno del Reino Unido afirmó que “las voces opositoras en el ejecutivo, la legislatura, la sociedad civil y los medios de Hong Kong prácticamente se han extinguido”.
Haciendo afirmaciones similares en su informe, que cubría los 12 meses a partir de marzo de 2021, el gobierno de EEUU acusó a las autoridades chinas de tomar medidas “que eliminaron la capacidad de la oposición pro-democracia de Hong Kong para desempeñar un papel significativo en el gobierno de la ciudad y criminalizaron efectivamente la expresión política crítica de los gobiernos central y local”.
Ambos informes acusaron al gobierno local de la región de encarcelar o descalificar a los políticos “pro-democráticos” de las elecciones.
“A medida que se acerca el 25 aniversario de la entrega de Hong Kong a Pekín, las libertades de Hong Kong están disminuyendo mientras la República Popular China (RPC) endurece su gobierno”, dijo el jueves el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, en un comunicado que acompaña a la último Informe sobre Política de Hong Kong.
Los últimos informes del Reino Unido y EEUU se producen después de que dos jueces de la Corte Suprema británica renunciaran al tribunal más alto de la región, citando los efectos de la Ley de Seguridad Nacional de China. La directora ejecutiva de Hong Kong, Carrie Lam, calificó su salida de “motivada políticamente”.
China propuso la ley de seguridad en junio de 2020 después de que varias protestas, acompañadas de actos de vandalismo, barrieran Hong Kong en 2019. La amplia ley penaliza los actos de secesión, subversión, terrorismo o colusión con potencias extranjeras.
El viernes, Hong Kong dijo que la ley había “restaurado la estabilidad” y que el gobierno local mantenía un “compromiso inquebrantable” con el estado de derecho, insistiendo en que no obstaculizaba las libertades en Hong Kong.
Source: Press TV