La lista de organizaciones terroristas considerada por Canadá pone de manifiesto el marcado doble rasero con el que Ottawa trata a los colonizados y a los colonizadores, advirtió el martes el escritor y activista Yves Engler.
Mientras que los grupos palestinos están criminalizados, Canadá mantiene estrechos vínculos con la principal organización terrorista sionista de la Palestina histórica, denunció Engler en su página digital.
Canadá vende armas al “ejército israelí” y las fuerzas armadas de ambos países colaboran en varios frentes, señaló.
Además, los funcionarios canadienses hacen la vista gorda ante el reclutamiento ilegal para el ejército israelí, mientras que la Agencia Tributaria de Canadá adopta un enfoque blando con respecto a las organizaciones benéficas registradas que desafían sus normas al ayudarlo financieramente, subrayó.
Medido por el número de mutilados o muertos, el ejército israelí es responsable de mucha más violencia que cualquier grupo palestino (y lo hacen en nombre de un proyecto colonial europeo), apuntó el autor de al menos 12 libros publicados.
Sin embargo, el ejército israelí no figura en la lista de organizaciones terroristas, acotó.
El lobby del apartheid de Canadá –apuntó el periodista- está argumentando que “Israel” puede aterrorizar a 2,2 millones de palestinos que viven en una prisión al aire libre porque alguna organización con medios limitados está catalogada en Canadá como grupo terrorista.
Durante las anteriores campañas de terror israelíes en Gaza, el lobby del apartheid justificó las acciones de “Israel”.
Más del 10 por ciento de la lista de terroristas de Canadá está formada por grupos con sede en una tierra ocupada desde hace mucho tiempo que representa la décima parte del uno por ciento de la población mundial, argumentó Engler.
Recordó que el viernes pasado, Tel Aviv lanzó su más reciente ola de violencia contra la asediada Gaza, durante la cual en 72 horas murieron 44 palestinos, entre ellos 16 niños.
Más de 300 palestinos resultaron heridos y muchos más perdieron sus casas, negocios u otras propiedades, destacó.
Los niños de Gaza –enfatizó- también quedaron marcados psicológicamente por los bombardeos y, en otra forma de castigo colectivo, “Israel” cerró la franja de 360 kilómetros cuadrados al mundo exterior.
Según el diario The New York Times, “Israel” dijo que sus ataques eran un esfuerzo preventivo para evitar un ataque inminente contra civiles israelíes”.
En lenguaje llano, “Israel” decidió utilizar la violencia “en su totalidad o en parte para un propósito, objetivo o causa política, religiosa o ideológica con la intención de intimidar al público”, que es la definición oficial de terror por la cual se ajusta Canadá.
Source: PL