Con motivo del 40º aniversario de la fundación de Hezbolá, el diario libanés Al-Akhbar habló con un alto líder de la Resistencia.
El líder, cuyo nombre no ha sido revelado, afirma que “el enemigo israelí actúa de vez en cuando sobre la base de que conoce el nivel de armamento que tenemos. Pero luego descubre que el nivel al que hemos llegado es mucho más alto”.
Y agregó: “Cuando “Israel” reveló su plan operativo para evitar la llegada de armas a la Resistencia, Sayyed Nasralá le dijo francamente que este asunto ya se completó y que las armas ahora están en manos de la Resistencia. De manera similar, cuando los israelíes hablaron sobre un plan para obstaculizar el desarrollo de capacidades de resistencia, Sayyed Nasralá también salió a decirles que hemos llegado a una etapa en la que estamos fabricando nuestras armas y estamos listos para vender armas cualitativas como misiles y drones”.
Armas que no existen en Irán
En este contexto, este alto miembro de la Resistencia continuó diciendo que “el enemigo tiene derecho a asumir que la Resistencia -en términos de armas y drones, por ejemplo- tiene el mismo armamento que Irán. Pero la gran verdad es que la resistencia en el Líbano tiene capacidades que se adaptan a sus necesidades y que ni siquiera existen en la República Islámica de Irán”.
Inaudito para “Israel” y sus colonos
En opinión del líder de la Resistencia, “la batalla con el enemigo israelí no se ha detenido a pesar de todas las circunstancias, y no se detendrá un día. El enemigo es consciente de este hecho, y se esfuerza por no llegar a la guerra. Esta guerra será devastadora para él en todos los sentidos de la palabra y no podrá enfrentarse a Hezbolá en todos los frentes. Si nos amenaza con la destrucción, como siempre hace, afirmamos que la destrucción de la entidad será mayor de lo que imagina. El enemigo debe saber que la guerra con Hezbolá esta vez significa la destrucción de la infraestructura de la entidad israelí, lo que convertirá la vida de los colonos en un auténtico infierno en el que no podrán vivir bajo el fuego y la destrucción. Estamos seguros que el enemigo sacará sus cadáveres de los escombros (de las ciudades) durante la guerra, algo inaudito para él y sus colonos”.
Y añadió en tono confiado: “El ejército israelí no podrá proteger las zonas marítimas, es incapaz de proteger sus instalaciones vitales, ni las fronteras terrestres, ni siquiera el frente interno de los bombardeos… Lo que implica que el enemigo ha perdido su capacidad defensiva, y ha perdido la razón de su existencia. Y cuando pierde la capacidad defensiva y ya no tiene la motivación para atacar, eso significa que se ha convertido en un ejército sin valor…”.
“Es por eso que decimos que en una guerra, el ejército israelí sabe con certeza que es incapaz de proteger los barcos que se supone que ingresan en los puertos palestinos, y mucho menos los buques de guerra. También sabe que si estalla la guerra, no haremos una guerra defensiva. Por primera vez en su historia, “Israel” tendrá que defenderse en las tierras de 1948. Sabemos que el enemigo planea evacuar las zonas fronterizas a una profundidad de 5 km de la frontera, y eso sí lo consideramos una retirada previa. Además, el enemigo sabe muy bien que todos sus puestos de avanzada y posiciones serán atacados por la resistencia”, continuó.
La imagen se ha invertido totalmente
Según las estimaciones del líder de la resistencia, “la parte que menos quiere la guerra es el propio ejército israelí, porque a nivel militar, “Israel” deriva su fuerza del estado de división de su entorno y de la posibilidad de abordar cada frente de batalla por separado. Sin embargo, la ecuación se invierte hoy. Los líderes israelíes, y los militares en particular, saben que “Israel” es una entidad artificial que fue fundada en un momento de debilidad, traición e imposición al pueblo palestino, que fue abandonado. Esta entidad trató de aguantar, sobrevivir y expandirse bajo la ilusión de un ejército invencible y bajo protección externa. Hoy, la imagen se ha invertido completamente”.
Posibilidad de una extensión de la guerra
El líder militar asevera que “en cualquier guerra que desate con Hezbolá, no estaremos solos. En caso de que estalle una guerra a gran escala, las facciones de la resistencia serán socios en la batalla…”
“En las hipótesis militares existentes se habla de la posibilidad de que “Israel” reciba un apoyo especial de EEUU u otros. La resistencia está lista para todas las opciones, incluida la forma de tratar con cualquiera que apoye a “Israel””.
Y recordó: “Durante los últimos diez días de la Guerra de Julio de 2006, el enemigo no solo recibió municiones adicionales desde EEUU, sino también expertos. Incluso contrató pilotos estadounidenses para ayudar a la Fuerza Aérea israelí y sus pilotos, exhaustos por la guerra en la que fracasaron. Ocultó estos hechos a su audiencia, pero no a nosotros”.
“Sin embargo, la situación es diferente hoy en día. Creemos que los estadounidenses no se atreverán a luchar directamente del lado del enemigo. Siempre refrescarán su memoria con lo que les sucedió entre los años 1983 y 1984 en el Líbano”, concluyó.
Source: Al Akhbar