El gobierno palestino condenó este domingo un ataque de colonos israelíes contra la Iglesia del Sepulcro de la Virgen María, ubicada en la zona ocupada de Jerusalén Este.
Esas continuas agresiones forman parte de la estrategia de Tel Aviv para judaizar el área, imponer la soberanía israelí y aislarla del resto de Cisjordania, denunció en un comunicado el Ministerio de Relaciones Exteriores y Expatriados.
Por su parte, el titular del Comité Presidencial Superior de Asuntos Eclesiásticos, Ramzi Khoury, acusó al “gobierno extremista y fascista de “Israel”” de patrocinar los crímenes cometidos por los colonos contra el pueblo palestino.
Esas acciones coinciden con la inminente llegada del Ramadán, mes sagrado para los musulmanes, el Domingo de Ramos y el Sábado Santo, subrayó.
Las frecuentes incursiones en la Mezquita de Al-Aqsa y a las iglesias son una violación del derecho internacional, que garantizan la libertad de culto, manifestó.
Las autoridades palestinas alertaron que esta mañana dos colonos ingresaron al templo con el objetivo de causar destrozos, pero fueron rechazados por un lugareño palestino.
A principios de este año, un grupo de ellos rompió cruces y lápidas de más de 30 tumbas en un cementerio cristiano en Jerusalén Este.
Recientemente el diario israelí The Jerusalem Post alertó que los ataques de los ultraortodoxos y colonos judíos contra los cristianos que viven o visitan la llamada Ciudad Santa se intensificaron en los últimos meses, aunque la policía evita intervenir.
Los hostigamientos se volvieron rutinarios, e incluyen escupir, maldecir y empujar a los sacerdotes en los callejones de urbe, subrayó el periódico.
Jóvenes de aspecto ultraortodoxo acuden en grupos para identificar a los sacerdotes con el fin de acosarlos y humillarlos, pero hasta ahora la policía no dio ni la más mínima respuesta, criticó.
El rotativo reveló que en el Barrio Armenio los residentes afirman que no reciben una respuesta adecuada ni se les da seguimiento a las denuncias presentadas ante las autoridades.
A principios de febrero, el patriarca latino de Jerusalén, Pierbattista Pizzaballa, condenó los sistemáticos ataques de extremistas israelíes contra los cristianos en esa ciudad.
En diciembre de 2021, patriarcas y jefes de iglesias en la metrópolis advirtieron que “los cristianos se han convertido en el objetivo de ataques frecuentes y sostenidos por parte de grupos radicales”.
Source: Prensa Latina