El Gobierno palestino denunció este martes los planes de “Israel” de ampliar el horario de entrada de los judíos a la Explanada de las Mezquitas de Al-Quds (Jerusalén), una decisión que calificó de peligrosa.
Consideramos “de extrema gravedad esta decisión colonial, judaizante y racista”, afirmó en un comunicado el Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados.
La Cancillería denunció que esa acción se adoptó en medio de las festividades por el Ramadán, mes sagrado para los musulmanes.
“Las autoridades israelíes buscan satisfacer a sus partidarios extremistas y resolver su crisis interna a expensas de los derechos de nuestro pueblo”, criticó el texto en alusión a la ola de protestas en la vecina nación contra una reforma judicial.
Este fin de semana el ministerio también cuestionó en otro comunicado las continuas incursiones de los colonos y las fuerzas de seguridad en la Explanada de las Mezquitas, tercer lugar más sagrado para los musulmanes.
Numerosos colonos y extremistas judíos, escoltados por un amplio despliegue policial, asaltaron este domingo el complejo religioso, ubicado en la Ciudad Vieja de la zona ocupada de Jerusalén Este.
Poco antes, los militares israelíes ingresaron al lugar y expulsaron a los musulmanes presentes.
Según los acuerdos alcanzados hace décadas, a los judíos solo se les permite visitar el sitio con numerosas condiciones, pero no rezar.
Sin embargo, bajo la creciente presión de los sectores de la derecha y ultraortodoxos aumentó el número de fieles de esa religión que intentan orar allí, lo cual es considerado por los musulmanes una provocación.
“Israel” ocupó la zona oriental de la metrópoli en la guerra de 1967, y desde entonces mantiene bajo su control el territorio pese a las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
De hecho, en 1980 las autoridades israelíes declararon a toda la urbe como la capital eterna e indivisible del país, una postura rechazada por la comunidad internacional.
Source: Prensa Latina