El Ejército de Israel impide a las organizaciones de derechos humanos acceder a la Franja de Gaza, según se desprende de un informe de Human Rights Watch (HRW).
De acuerdo con la ONG, las acciones restrictivas de las Fuerzas Armadas de Israel no permiten que los defensores de derechos humanos registren y eliminen violaciones de los derechos humanos y del derecho internacional.
Israel controla todos los movimientos entre Cisjordania y la Franja de Gaza, incluso si las rutas no pasan a través de su territorio, sostiene HRW.
Según la organización, Israel bloquea los desplazamientos en la región por razones de seguridad y por sus compromisos ante la Franja de Gaza que prescriben proporcionar acceso a la zona solo en excepcionales circunstancias humanitarias: el trabajo de los defensores de derechos humanos no figura en esta categoría.
“Estas barreras tienen un efecto directo sobre el trabajo de las organizaciones de derechos humanos en el registro de violaciones de las leyes de la guerra, incluidos los crímenes de guerra”, subraya el informe.
Por razones humanitarias, indica, el Ejército israelí permite pasar cada mes a unos 7.000 comerciantes y 700 representantes de organizaciones internacionales.
El informe incluye, además, una serie de recomendaciones a Egipto, la Corte Penal Internacional, el movimiento Hamás y a los Ministerios de Defensa y del Interior para facilitar el trabajo de los defensores de derechos humanos en la Franja de Gaza y Cisjordania.
El estudio de HRW se basa en entrevistas con 12 organizaciones palestinas de derechos humanos con sedes en Gaza, así como con dos extranjeras y una compañía israelí.
Human Rights Watch es una organización no gubernamental con sede en EEUU que monitorea e investiga violaciones de derechos humanos en más de 70 países.
Según datos oficiales, la organización financia su labor a través de donaciones privadas, en su mayoría procedentes de América del Norte y Europa Occidental.