El ministro de Relaciones Exteriores de Siria, Faisal al-Miqdad, y su homólogo saudí, el príncipe Faisal bin Farhan Al Saúd, han pedido el fin de la presencia militar extranjera en el suelo sirio y las intervenciones de Occidente en el país árabe, en un momento en que los dos países reanudan las relaciones diplomáticas después de más de una década.
En una declaración conjunta emitida luego de una reunión entre los dos principales diplomáticos en la ciudad portuaria de Yeddah, en el Mar Rojo, el miércoles por la noche, ambas partes acordaron reanudar los servicios consulares y los vuelos directos entre Damasco y Riad, y trabajar juntos para reforzar la seguridad regional y combatir todas las formas de terrorismo.
También discutieron los pasos necesarios para lograr una solución política integral a la crisis en Siria y poner fin a todas sus repercusiones, asegurar la reconciliación nacional y contribuir al regreso de Siria al ámbito árabe y su papel natural en el mundo árabe.
En la declaración conjunta, ambas partes coincidieron en la necesidad de que el Estado sirio reafirme su control sobre todos sus territorios y se ponga fin a la presencia de todas las fuerzas extranjeras.
El ejército estadounidense ha estacionado sus fuerzas y equipos en el noreste de Siria sin el consentimiento del gobierno sirio, y el Pentágono afirma que el despliegue tiene como objetivo evitar que los campos petroleros en el área caigan en manos de los terroristas del Daesh.
Sin embargo, Damasco dice que el despliegue estadounidense tiene como objetivo saquear los recursos naturales de Siria. El ex presidente estadounidense Donald Trump admitió en varias ocasiones que las fuerzas estadounidenses estaban en el país árabe por su riqueza petrolera.
Los principales diplomáticos sirios y saudíes también enfatizaron la necesidad de abordar las dificultades humanitarias y establecer un entorno adecuado para que los suministros de ayuda lleguen a todas las partes de Siria, según el comunicado.
Hicieron hincapié en la importancia del regreso de los refugiados sirios y los desplazados internos a sus lugares de origen, además de los pasos necesarios para estabilizar la situación en Siria.
El ministro de Relaciones Exteriores sirio aterrizó en Yeddah el miércoles en la primera visita de un alto diplomático sirio al reino en más de una década, una señal importante de que el aislamiento regional de Siria está llegando a su fin.
El viaje de Miqdad al reino se produjo dos días antes de que Arabia Saudí organice una reunión de ministros de Relaciones Exteriores regionales para discutir el regreso de Siria a la Liga Árabe.
Source: Press TV