Las elecciones turcas afectan a los millones de sirios que residen tanto en Turquía como en Siria. Cada uno de ellos tiene sus inquietudes que varían según su situación y su influencia sobre lo que sucede en Turquía.
Con una competencia sin precedentes, según las encuestas de opinión, no hay duda de que las próximas elecciones turcas son un hito importante que repercutirá en toda la región. El hecho es que los resultados de estas elecciones determinarán la forma y dirección de la política turca en los próximos años.
Además de los ciudadanos sirios residentes en Turquía, que se ven directamente afectados por los resultados de las elecciones y sus campañas, los sirios de toda la geografía siria esperan con cautela los resultados, tratando de predecir sus repercusiones cercanas y lejanas sobre ellos en una cuestión que los ha estado molestando desde la intervención militar turca directa en el norte de Siria en 2016 hasta hoy.
Sirios en Turquía
Aproximadamente 4 millones de sirios que residen en Turquía están en el ojo de la tormenta electoral. Todos los partidos turcos colocan su regreso en la parte superior de su agenda, incluso si las formas de realizarlo son diferentes. Las encuestas de opinión dicen que más del 88 por ciento de los turcos quieren el regreso de los sirios.
El Partido Justicia y Desarrollo, cuyo gobierno ha naturalizado a cerca de 300.000 ciudadanos sirios, apuesta por los votos de 120.000 votantes, pero esto también puede fortalecer a la oposición.
Si gana Kilicdaroglu, los sirios en Turquía creen que las restricciones “oficiales” turcas aumentarán en general, y en especial sobre los círculos de la oposición siria que Erdogan patrocinó en Turquía, con el objetivo de acelerar el proceso de restablecimiento de relaciones con Damasco que Kilicdaroglu prometió en su programa electoral.
Ansiedad en Idleb
En cuanto a la parte de Idleb y otras áreas del norte bajo el control de Hayat Tahrir al-Sham o lo que se conoce como el “Ejército Nacional”, el momento en que se cerraron las fronteras del lado turco frente a los sirios, a raíz del terremoto de Kahramanmaraş, constituyó un punto de inflexión en el estado de ánimo de los residentes sirios en estas áreas, que se consideraron defraudados y abandonados después de que el Estado turco cerrara por completo los tres cruces fronterizos y no los abrió hasta después de 8 días, con el pretexto de la falta de rutas válidas. Una administración de Kilicdaroglu podría mantener una postura de más dureza hacia estos grupos terroristas y facilitar su eliminación por Damasco.
La Yazira Siria y las FDS
La última declaración emitida por las FDS pocas horas después de la visita del ministro de Relaciones Exteriores de Arabia Saudí a Siria fue notable en términos de tiempo y contenido, ya que afirmó su adhesión a la “unidad de los territorios sirios” y exigió la distribución de riqueza y recursos económicos “justamente” entre las regiones sirias, incluidos los campos de petróleo y gas, la mayoría de los cuales se encuentran dentro de sus áreas de control.
Una posición para ser leída en el contexto de la aceleración de la apertura árabe a Damasco, y el temor de las FDS a quedar aisladas. La situación también coincide con las elecciones turcas, en las que las posibilidades de sus enemigos del Partido de la Justicia y Desarrollo son iguales a las de la oposición apoyada por los kurdos de Turquía, representados por el Partido Democrático de los Pueblos (HDP). Sin embargo, un triunfo de Kilicdaroglu podría no ser tampoco una buena noticia, si este coloca el restablecimiento de las relaciones con Damasco en su lista de prioridades y es poco probable que cualquier gran partido turco mantenga una postura favorable hacia las organizaciones armadas kurdas de Siria.
Siria se negó a dar a Erdogan una carta ganadora
Siria se negó a darle a Erdogan una carta electoral decisiva y no aceptó ningún acercamiento antes de la retirada de las fuerzas turcas.
El gobierno sirio sigue siendo la parte más tranquila a la espera de los resultados de las elecciones turcas. Se negó a hacerle un regalo electoral a Erdogan, en detrimento de su rival, que ha hecho de la normalización de las relaciones con el Gobierno sirio una prioridad en su programa electoral. Esto fue algo que el Partido Justicia y Desarrollo intentó soslayar antes de las elecciones al no poder obtener lo que quería.
En este contexto, algunos expertos afirman que si cualquier acercamiento tiene éxito a corto plazo puede resultar en una retirada de las facciones pro-turcas de algunos territorios, al norte de la autopista internacional M4, en implementación del acuerdo del 5 de marzo de 2020.
Una retirada, si se lleva a cabo, permitirá al estado sirio controlar áreas importantes y estratégicas al oeste de Maarat al-Numan y al norte de Kafr Nabl y extender su soberanía sobre todo Yabal al-Zawiya y la llanura de Al-Gab, áreas que son considerados los puntos fuertes más importantes de los grupos armados, por lo que el enclave de Idleb no tiene una importancia urgente en la actualidad.